Méndez y Del Río resuenan con personajes en "Half Brothers"
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Desde parientes desconocidos, hasta relaciones complicadas con sus padres: los actores Luis Gerardo Méndez y Connor Del Rio, al igual que el director Luke Greenfield, pudieron conectarse profundamente a nivel personal con el lado emotivo de la comedia “Half Brothers”.
En el filme, que se estrena el viernes en Estados Unidos y el 30 de diciembre en México, dos medios hermanos completamente diferentes se unen en un viaje por carretera, acompañados por una cabra, en busca de pistas sobre su padre recientemente fallecido.
Renato (Méndez), el hermano mayor, es un exitoso empresario mexicano que está a punto de casarse cuando se entera de la existencia de su medio hermano Asher (Del Rio), un estadounidense millennial despreocupado que nunca ha tenido un trabajo fijo y que se dedica a publicar fotos de su desayuno en Instagram.
La historia de la familia se ve marcada por 1994, cuando el padre de Renato, interpretado por el actor colombiano Juan Pablo Espinosa, deja México debido a la crisis económica que cimbró al país ese año. Renato no vuelve a verlo hasta que su padre está a punto de morir.
“Para mí era muy importante abordarlo a partir de sus heridas, de las heridas de la infancia que tiene que definen profundamente quién es él”, dijo Méndez en una entrevista por videollamada desde la Ciudad de México. “Siendo muy niño le rompen el corazón y de alguna manera él inconscientemente se cierra... no vuelve a confiar en nadie más”.
Méndez, quien también es productor ejecutivo de la película escrita por Eduardo Cisneros y Jason Shuman, se unió al proyecto hace cinco años, no mucho después de que su padre le confesara que tenía una media hermana dos años mayor en Estados Unidos. Era la primera vez que oía de ella, pero en ese momento no la buscó.
“Cuando empezamos a desarrollar la película y el guion, ya cada vez más cerca de filmar, se empezó a volver para mí una necesidad muy grande el contactarla”, contó el actor. “Fue muy especial porque no solamente me ayudó a entender mejor a este personaje y la película que estábamos haciendo, sino que además siento que me volvió un ser humano más sano”.
Reencontrarse con su media hermana, dijo, también le sirvió para entender mejor a su padre y a sí mismo.
“Eso vino por la película. La película me destapó eso”, agregó. “La última media hora (de ‘Half Brothers’) es una montaña rusa emocional donde no puedes parar de llorar y espero que se abran esas puertas para iniciar esas conversaciones pendientes”.
En su caso, Del Río, cuya madre es de origen cubano y cuyo padre es de ascendencia alemana e irlandesa, contó que tuvo una relación compleja con su padre, similar a la de los medios hermanos en la cinta.
“Me conecté mucho, mucho con Asher”, dijo en entrevista por videollamada desde Chicago. “Sentí que era importante contar la historia porque hay millones de niños y niñas, también personas trans, que tienen relaciones complicadas con sus padres... Me encanta contar esa historia para que la gente sienta que no está sola”.
Su personaje en la película es impulsivo y en un arranque rapta a una cabra que se vuelve la compañera de viaje de los hermanos.
“Esa cabra es una diva, Luis te dirá lo mismo: D-I-V-A”, dijo Del Río, cuyos créditos incluyen la serie “This Isn’t Working” y la cinta “Unfriended: Dark Web” (“Eliminar amigo 2”). “La primera semana de filmación se daba de topes contra mi pierna todos los días, no se veía porque estaba debajo de la cámara... Eventualmente pudimos desarrollar una relación cercana y a veces, de vez en cuando, pienso en Geroge (la cabra), incluso lo extraño”.
Encontrar a Asher no fue sencillo: 300 actores audicionaron para el papel. Del Río, de hecho, fue el primero. Méndez dijo que en parte lo eligieron por su capacidad de improvisación y su enorme carisma. Su personaje le dice cosas terribles a Renato sin dejar de ser simpático, como “¿Ya te sientes seguro? Estás en Estados Unidos”, cosas que Méndez ha sufrido en la vida real.
Por eso para él era importante presentar a otro tipo de mexicano, dueño de una compañía de aviación, exitoso y sin ningún interés de emigrar a Estados Unidos. “Los mexicanos también somos empresarios, también somos pintores, escritores, periodistas”, dijo.
Pero el viaje con Asher le hace perder el recelo al país del norte mientras van de Chicago a San Luis, Oklahoma City, Santa Fe y El Paso.
La cinta se filmó en el verano de 2019 principalmente en Albuquerque, Nuevo México, y de manera remota en San Miguel de Allende, Guanajuato, con el director siguiendo a la unidad a través de Skype. Era un experimento totalmente nuevo para él, que poco se imaginaba que en 2020 muchos trabajos se harían de esa manera.
“Fue una experiencia muy interesante”, dijo Greenfield desde Hollywood. “Fue una locura. Soy un director de manos a la obra y fue difícil no estar ahí cara a cara con los actores”.
En su caso, la película también resonó a un nivel muy personal.
“Tuve que revisar profundamente el divorcio de mis padres, mis asuntos con ellos y el divorcio por el que estoy pasando”, dijo el realizador. “Queríamos ser muy honestos como cineastas al poner esa emoción en la película”.
El director de “Something Borrowed” (“No me quites a mi novio”) y “The Girl Next Door” (“La chica de al lado”) dijo que lo que le atrajo de “Half Brothers” fue la oportunidad de presentar dos tonos diferentes en una misma película: una comedia entre la pareja dispareja de hermanos, y el drama sobre su padre inmigrante mexicano.
“Quería ver si podía equilibrar y transitar entre ambos tonos y hacer que el público pasara continuamente de la risa a las lágrimas y de nuevo a la risa”, dijo Greenfield. “Creo que la gente estará agradablemente sorprendida con el golpe emocional que te da esta película, especialmente al final”.