Uruguay busca respuestas, tras brote de COVID en selección
MONTEVIDEO (AP) — En la cancha, Uruguay obtuvo un resultado mixto durante la reciente doble fecha de las eliminatorias mundialistas: Una resonante victoria ante Colombia en Barranquilla, seguida por la derrota en Montevideo frente a Brasil.
Pero en el aspecto médico, la Celeste padeció con el COVID-19, que le ha generado reclamos en el ámbito político y deportivo. Miembros de la selección han debido defenderse de las críticas, mientras los dirigentes buscan una explicación.
Diecisiete jugadores, entre ellos su goleador histórico Luis Suárez, e integrantes del cuerpo técnico han dado positivo al nuevo coronavirus después de los partidos por las eliminatorias sudamericanas a Qatar 2022.
La sospecha más firme que baraja la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) es que Matías Viña, de 23 años y lateral izquierdo del Palmeiras brasileño, habría llevado el virus a la “burbuja” donde convivieron jugadores y cuerpo técnico durante la última doble fecha, en la que Uruguay goleó 3-0 a Colombia pero después sucumbió 2-0 ante Brasil.
El sábado 8 de noviembre, Palmeiras venció por la mínima diferencia al Vasco Da Gama por el campeonato brasileño. Tras el encuentro se supo que Luan Vieria, delantero del equipo albiverde, dio positivo. A partir de ese caso, el conjunto paulista confirmó 17 infecciones hasta esta semana, incluida la de Viña.
El defensa uruguayo fue sometido a varios tests. No dio positivo sino hasta el sábado 14 a las 7 de la mañana, cuando llegó desde Barranquilla. Para entonces, había pasado siete horas y media en un avión, donde viajaban los 43 miembros de la selección.
Al lunes siguiente, se hicieron nuevos hisopados a las 43 personas y se conocieron tres casos más. En los días posteriores, la cifra aumentó a 10 jugadores, entre ellos el capitán Diego Godín, Suárez, el mediocampista Lucas Torreira (ambos del Atlético de Madrid) y seis integrantes del cuerpo técnico, incluido el médico Jorge Pan.
Durante las últimas semanas, Uruguay ha acumulado un récord de infecciones por el coronavirus. Desde los primeros casos detectados en el país en marzo nunca se habían registrado tantas infecciones diarias como en estas últimas dos semanas.
Uruguay, con una población de 3,5 millones, tiene un estatus sanitario privilegiado aún: 4.700 personas han sido sido afectadas por la enfermedad desde mediados de marzo y actualmente hay 949 casos activos detectados. Son cifras comparativamente bajas con respecto a otros vecinos de Latinoamérica.
Las autoridades sanitarias entienden que hay un “relajamiento” de los uruguayos respecto al virus y aprovecharon el brote en la selección para volver a recordar la importancia de seguir con las medidas individuales de contención de la enfermedad.
Los jugadores infectados y el cuerpo técnico han presentado si acaso síntomas leves, sin ningún tipo de complicaciones. El jueves por la noche, Godín sintió como si estuviera incubando una gripe, pero ya el viernes se sentía mucho mejor sin percibir síntomas, según señaló a la televisora local Teledoce.
Pero la situación disgustó al presidente del Atlético de Madrid, Enrique Cerezo, quien aseguró que los responsables de la Celeste “no han tenido control sobre la pandemia”.
El brote ilustró las dificultades para dar seguimiento a la situación de futbolistas que viajan juntos en medio de la crisis mundial de salud. Durante el partido con Brasil, Godín fue negativo pero dos días después dio positivo.
Pero también quedó claro lo difícil que es guardar el distanciamiento social en medio de las emociones que suscita una eliminatoria sudamericana.
Después de la victoria sobre Colombia, jugadores de la selección y prensa especializada publicaron fotografías donde algunos futbolistas aparecen muy cerca uno del otro, fundiéndose en abrazos. Después de todo, Uruguay nunca había ganado en Barranquilla.
Esas y otras postales de los días siguientes se viralizaron en las redes sociales y causaron el enojo del ministro de Salud Pública de Uruguay, Daniel Salinas.
El viernes las autoridades sanitarias se reunieron con la AUF tras abrir una investigación para determinar si se habían violado los protocolos sanitarios.
Desde España, donde cumple su cuarentena, Suárez dio una entrevista al Canal 10 de la televisión uruguaya y expresó pesar por las críticas.
"No estábamos juntos como en la foto que fue un segundo”, remarcó el delantero que se perdió el partido contra Brasil y el de su club contra el Barcelona el sábado por La Liga española.
Godín afirmó que se respetaron los protocolos tanto en Uruguay como en Barranquilla. El capitán uruguayo calificó al ministro como “un poco subjetivo”.
“No me parece justo que a raíz de una foto se digan cosas que no son verdad”, comentó Godín el viernes. “Nos contagiamos todos y el virus estaba circulando desde que estábamos en Colombia y no lo sabíamos porque estábamos negativos”.
Visiblemente ofuscado por las acusaciones del ministro, el presidente de la AUF Ignacio Alonso sentenció: Hubo “descuidos, pero negligencia o desidia no”.
En la reunión con el Ministerio de Salud Pública, se revisaron fotografías de los jugadores, pero antes de que la AUF pudiera hacer sus descargos, el ministro Salinas anunció por Twitter una multa mayor a los 15.000 dólares por incumplimiento de los protocolos sanitarios dentro del Complejo Uruguay Celeste, cuartel general del combinado.
Ahora la AUF elabora su respuesta. Un integrante de la selección afirmó que en ésta hay malestar porque en la carpeta de investigación se mostraron fotos de prensa descontextualizadas y no se tuvo en cuenta que el plantel tuvo los recaudos indicados.
La persona, que habló con The Associated Press a condición de permanecer anónima, reconoció en cambio que hubo situaciones de mayor exposición, imposibles de controlar, como compartir espacios cerrados durante varios días, viajar en largos vuelos, emprender varios traslados en ómnibus e incluso usar los estrechos camerinos del estadio del Junior de Barranquilla.
El martes se volverán a hisopar los 43 integrantes de la selección, tras el período recomendado de una semana desde el primer caso. En marzo se jugará la próxima fecha de las eliminatorias. Uruguay enfrentará a Argentina y Bolivia.
“La enseñanza es clara. Si nos contagiamos nosotros, que supuestamente estábamos en una burbuja donde cada 48 horas nos hacían test que daban negativo, nadie es inmune”, sostuvo Suárez. “Eso tiene que servir de lección para la sociedad. Nadie es inmune y nosotros un poco bajamos la guardia".