CIDH busca esclarecer las muertes en protestas en Bolivia
LA PAZ (AP) — La Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) anunció el lunes el inicio de una investigación de las 36 muertes en las protestas del año pasado en Bolivia para ayudar al esclarecimiento y la paz en un país todavía polarizado.
La CIDH “desarrollará su trabajo de manera independiente e imparcial”, escuchará a todas las partes y emitirá “recomendaciones para un plan de atención y reparación integral de las víctimas”, dijo el organismo en un comunicado.
Sectores afines al expresidente Evo Morales piden investigar lo que afirman fue una “masacre” de partidarios del exgobernante durante las protestas, en tanto que los opositores exigen indagar todas las muertes.
La CIDH detalló que la investigación llevará seis meses y abarcará desde septiembre a diciembre de 2019, mientras que el ministro de Justicia, Iván Lima, dijo que el gobierno garantizará “acceso irrestricto” a la información.
Acusaciones de fraude en los comicios de octubre del 2019, en los que Morales buscaba un cuarto mandado, desencadenaron un estallido social que dejó 36 muertos, entre partidarios del exmandatario y opositores, lo que precipitó la renuncia de Morales y su salida al exilio.
La senadora opositora Jeanine Áñez se autoproclamó presidenta interina pero su mandato estuvo marcado por persecución judicial a partidarios de Morales y por dos masacres de las fuerzas del orden, según denunciaron organizaciones internacionales.
En un informe preliminar, la CIDH calificó de “masacre” las muertes en Senkata y Sacaba en las que murieron al menos 18 personas cuando militares y policías reprimieron a partidarios de Morales.
El gobierno de Áñez calificó ese informe de “sesgado” y “unilateral” e invitó a la CIDH a enviar un equipo de expertos “independientes”.
Durante las protestas supuestos partidarios de Morales incendiaron casas de dirigentes de la oposición, quemaron 60 autobuses, retenes policiales y se registraron muertes en sus filas, según los opositores.
El gobernante Movimiento al Socialismo (MAS) ha pedido el inicio de un juicio contra Áñez.
“A un año de la masacre, recordamos a los héroes por la democracia... La justicia boliviana, de oficio, por compromiso con la vida, debe avanzar en la investigación y dar con los responsables”, dijo la semana pasada Morales en su cuenta de Twitter.
“El pueblo boliviano sabe que cualquier juicio que inicie el MAS o su sistema judicial, no es un juicio independiente. Pido investigación imparcial y con observadores internacionales...” replicó Áñez, también por Twitter.
La periodista y analista Maggy Talavera considera que “entre tantas tareas urgentes, la de garantizar la vigencia plena de los derechos humanos y el cumplimiento de las garantías constitucionales debería ocupar el primer lugar. Sin ello no hay paz ni estabilidad posible”.
Calificada como endémicamente débil, diversos informes internacionales han cuestionado la falta de independencia de la justicia boliviana y su sometimiento al poder político, lo que ha impedido en el pasado esclarecer muertes de manifestantes en protestas sociales.
El esclarecimiento de estas muertes es una tarea central del presidente Luis Arce, del partido de Morales, quien asumió el 8 de noviembre tras ganar los comicios de octubre pasado.
En un comunicado del fin de semana, la oficina de Naciones Unidas en Bolivia llamó al gobierno y los actores políticos “a redoblar esfuerzos para consolidar la paz, los valores democráticos, el respeto a los derechos humanos y la superación de las diferencias por la vía del diálogo”.