Jefe OTAN advierte del riesgo de sacar tropas de Afganistán
BRUSELAS (AP) — El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, advirtió el martes que la organización militar podría pagar un alto precio por abandonar Afganistán demasiado pronto. Se esperaba que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, retirase en las próximas semanas a una parte considerable de las tropas estadounidenses en el país.
La OTAN tiene en Afganistán menos de 12.000 militares de decenas de países, que ayudan en la instrucción y asesoría de las fuerzas nacionales de seguridad. Las tropas estadounidenses suelen suponer en torno a la mitad del contingente, y la alianza de 30 países es muy dependiente de las fuerzas estadounidenses para transporte, logística y otra asistencia.
“Ahora afrontamos una decisión difícil. Llevamos casi 20 años en Afganistán, y ningún aliado de la OTAN quiere quedarse más de lo necesario. Pero al mismo tiempo, el precio por marcharnos demasiado pronto o de forma descoordinada podría ser muy alto", indicó Stoltenberg en un comunicado.
El país devastado por la guerra todavía “se arriesga a convertirse de nuevo en plataforma para que terroristas internacionales planeen y organicen ataques en nuestros países. Y el ISIS podría reconstruir en Afganistán el califato de terror perdido en Siria e Irak”, dijo, empleando otras siglas para el grupo extremista Estado Islámico.
La decisión de Estados Unidos llegó unos días después de que Trump instalara en puestos del Pentágono a varias personas afines que comparten su frustración con la presencia continuada de tropas en zonas de guerra. Se esperaba que los nuevos planes dejaran 2.500 militares estadounidenses en Afganistán a partir de mediados de enero.
Según funcionarios estadounidenses, los mandos militares fueron informados durante el fin de semana de los planes de retirada y de que se está preparando un decreto, aunque aún no se ha enviado a los comandantes.
La OTAN tomó el mando de la misión internacional en Afganistán en 2003, dos años después de que una coalición liderada por Estados Unidos derrocara al régimen Talibán por acoger al líder de Al Qaeda Osama bin Laden. En 2014, comenzó a instruir y asesorar a las fuerzas de seguridad afganas, pero ha retirado gradualmente a sus tropas dentro de un acuerdo de paz mediado por Estados Unidos.
Stoltenberg dijo que “incluso con más reducciones de Estados Unidos, la OTAN continuará su misión de entrenar, asesorar y asistir a las fuerzas de seguridad afgana. También estamos comprometidos a financiarlas hasta 2024”.