Tras desafiar normas políticas, Trump choca con la realidad
WASHINGTON (AP) —
Donald Trump fue un presidente improbable que desafió las leyes de la gravedad política, un empresario de bienes raíces y estrella de reality shows que ascendió al máximo cargo nacional. Pero ahora se ha estrellado con la realidad.
Pero a fin de cuentas, sus bulliciosos mítines, maquinaria política y fuerza de voluntad no pudieron imponerse a la realidad de su profunda impopularidad y de la devastadora pandemia de coronavirus, que ha matado a más de 236.000 personas en Estados Unidos y ha dejado a millones más sin empleo.
Aun así, su actitud combativa hacia la política — sus bravuconadas en Twitter, su rencor hacia sus adversarios y su inclinación por aislar a Estados Unidos del resto del mundo — dejó su marca en todos los niveles de gobierno y en otras esferas también. Y su desempeño electoral, mejor al que se preveía a pesar de su derrota ante el candidato demócrata Joe Biden, presagia que la tendencia perdurará durante generaciones en el gobierno y en el activismo político.
Habrá que ver qué termina haciendo Trump una vez que Biden asuma la presidencia el 20 de enero. ¿Se dedicará a jugar golf? ¿Fundará su propio canal de televisión? ¿Intentará postularse nuevamente? Y lo más inmediato: ¿Seguirá resistiéndose a este resultado electoral?
“Definitivamente creo que Trump seguirá involucrado en la política, y definitivamente creo que será uno de los que se postularán en el 2024. A él no le gusta perder”, declaró Mick Mulvaney, quien fue jefe de despacho de Trump, en una entrevista online con el Institute of International & European Affairs.
Trump sigue teniendo su popular cuenta de Twitter y las simpatías del canal de televisión Fox News, mediante los cuales puede dirigirse a sus seguidores incondicionales, quienes desde hace meses creen que no había manera de que él perdiera a menos que hubiera trampa, y que incluso declararon, falsa y prematuramente, que Trump había ganado.
El sábado, Trump se negó a admitir derrota alguna y en lugar de ello amenazó con presentar recursos jurídicos para revertir el resultado electoral.
En tanto no surja un sucesor que dirija a las filas republicanas — lo que probablemente no ocurrirá sino hasta después de las primarias del 2024 — Trump queda como líder de facto de ese partido, al que ha esculpido a su imagen.
“Aun en la derrota, Donald Trump ha superado las expectativas y ha ayudado a otros republicanos a hacer lo mismo”, declaró Michael Steel, un consultor republicano. “Seguirá siendo una fuerza poderosa dentro del partido”.
Aun así, la derrota probablemente desatará un debate interno sobre hasta qué punto los republicanos deben seguir siendo leales al trumpismo, dado que podrían retener el control del Senado y aumentaron su presencia en la Cámara de Representantes.