Irak retira tiendas de campaña de movimiento de protesta
BAGDAD (AP) — Las fuerzas de seguridad de Irak retiraron el sábado unas tiendas de campaña de una plaza central de la capital que ha sido el epicentro del movimiento de protesta contra el gobierno, un año después de que las manifestaciones contra la corrupción desencadenaron meses de enfrentamientos con las autoridades en todo el país.
Más de 500 personas han fallecido durante los meses del movimiento de protesta, luego de que muchos de los manifestantes fueron baleados por las fuerzas de seguridad iraquíes.
Las autoridades de la nación también reabrieron el puente aledaño Jumhuriyah, que conduce hacia una zona fortificada que alberga edificios del gobierno y embajadas extranjeras. El puente que cruza el río Tigris fue escenario de fuertes enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas del gobierno el año pasado, cuando los manifestantes trataron de cruzarlo. Desde entonces, ha estado cerrado al tránsito.
La reapertura del puente y el retiro de las tiendas de campaña en la Plaza Tahrir pareció poner un fin oficial a un movimiento masivo que por un breve momento había dado esperanza a los iraquíes de un mejor futuro.
“La reapertura del puente Al-Jumhuriyah y el retiro de las tiendas de la Plaza Tahrir fue realizado en coordinación con los manifestantes y no hubo tensiones”, dijo el mayor general Qais Al-Mohammadawi, director del Comando de Operaciones de Bagdad.
Las fuerzas de seguridad utilizaron excavadoras para ayudar a retirar algunas de las tiendas de campaña de los manifestantes que seguían en la plaza. Unos días antes, miles de personas se habían reunido allí para conmemorar el aniversario de las protestas masivas que arrasaron con el país en contra de la corrupción de los partidos políticos de Irak y su sistema sectario.
Pese a alcanzar números sin precedentes en 2019 y poner presión sobre las élites, las protestas contra el gobierno han estado mayormente en pausa debido a la pandemia de coronavirus. Los activistas también dijeron que la caída en los números fue consecuencia de una violenta represión por parte de las fuerzas de seguridad iraquíes y de grupos de milicias, así como de secuestros y asesinatos.