Davis enfrenta a Santa Cruz, en busca del estrellato
Gervonta Davis quiere ser una estrella, cuyas peleas reditúen jugosos ingresos en la modalidad de pago por ver a través de la televisión. Esa meta es parte de su deseo de emular a Floyd Mayweather Jr., su promotor y mentor.
Asimismo, el púgil de Baltimore quiere estar frente a muchos seguidores delirantes. Por ahora, tendrá que conformarse con un público limitado por la pandemia, el sábado en San Antonio, donde se realizará su combate por el título con el veterano mexicano Leo Santa Cruz.
“Definitivamente estoy emocionado, después de todo lo que ha ocurrido, por pelear frente a un grupo de fanáticos”, dijo “Tank” Davis. “Estoy listo para dar un buen show”.
Ese espectáculo difícilmente atraerá a muchos seguidores en Estados Unidos fuera del Alamodome. El modelo de pago por ver no está muerto, pero tampoco constituye la única vía mediante la que pueden mirarse las peleas.
Ello resultó evidente este mes, cuando el hondureño Teófimo López se impuso por decisión a Vasiliy Lomachenko en una contienda de unificación del cetro de los ligeros, que generó buenas cifras de audiencia en ESPN.
Terence Crawford vuelve también a los cuadriláteros el 14 de noviembre, para enfrentar a Kell Brook, en otro pleito que se ofrecerá mediante la televisión por cable sin costo adicional para los suscriptores.
Pero Mayweather considera que hay futuro en la vertiente de pago por ver para Davis, un astro en ascenso que cuenta con carisma y pegada. Ello significa que los aficionados al boxeo tendrán que desembolsar 74,99 dólares para ver la función.
La oferta no luce muy tentadora, mucho menos en medio de la pandemia.
“Él es una de las grandes estrellas en el deporte”, comentó Mayweather. “He trabajado en este proyecto y voy a seguir ayudándolo a que crezca”.
Davis pasó 12 semanas entrenándose dentro del gimnasio de Mayweather en Las Vegas, a fin de estar listo para la contienda. Busco cerciorarse de bajar al peso pactado de 130 libras.
La última vez que peleó Davis, lo hizo en el límite de las 135 libras. Fue en diciembre, cuando derribó tres veces al cubano Yuriorkis Gamboa, antes de que la pelea fuera detenida en el duodécimo asalto.
El invicto Davis participará por primera vez en una función de pago por ver, y opina que hay mejores cosas por venir.
“Definitivamente pienso que todo va en ese sentido. Estoy en el camino correcto para alcanzar la grandeza”, indicó. “Simplemente tengo que seguir haciendo lo que hago en el ring y ofrecer una clínica”.
Davis (23-0 con 22 nocauts) enfrenta quizá su mayor desafío como profesional.
El “Terremoto” Santa Cruz ha ganado títulos en cuatro divisiones y ostenta actualmente el cinturón de las 130 libras. Tanto ese cetro como el de Davis en las 135 estarán en juego durante el combate.
Pero Davis afirma que es el mejor boxeador y que pega más duro. Es además siete años menor que Santa Cruz.
El popular peleador de Huetamo, de 32 años, ha protagonizado grandes batallas, pero parece más cerca del ocaso de su carrera boxística.
Ello significa que Davis es el gran favorito —por 7-1 en Las Vegas. Pero Santa Cruz (37-1-1 con 19 nocauts) ha perdido sólo un enfrentamiento, y siempre es combativo.
“Todos son libres de pensar lo que quieran, mi trabajo estará en subir al ring y demostrar que se equivocan, para mí es una pelea sumamente importante y para la que me preparé muy fuerte, pues estoy viviendo mi sueño desde chico. Ser un peleador de pago por ver”, dijo Santa Cruz.
Será la primera función relevante de boxeo a la que se permita el ingreso de público desde que sobrevino la pandemia. Sin embargo, la cantidad de gente será muy reducida, y los espectadores deberán guardar una distancia segura entre sí.