Miles protestan en Barcelona contra visita del rey de España
BARCELONA (AP) — Miles de separatistas catalanes protestaron el viernes por la visita a Barcelona del rey español Felipe VI y del presidente del gobierno Pedro Sánchez, en medio de tensiones entre la región conflictiva y las autoridades de la nación.
Las autoridades colocaron policías y retenes en las calles aledañas a la estación de tren donde el monarca y el mandatario asistieron a los premios de innovación de la Semana de la Nueva Economía de Barcelona.
La visita de los jefes de Estado y del gobierno de España se produce menos de dos semanas después de que el presidente regional de Cataluña, Quim Torra, fue retirado del cargo por el Tribunal Supremo. La corte lo declaró no apto para ocupar el cargo debido a que violó las leyes electorales cuando se negó a quitar una pancarta de edificios públicos en la que apoyaba a los separatistas catalanes encarcelados durante la campaña electoral oficial.
Algunos grupos pequeños de manifestantes se congregaron para quemar fotografías del rey el jueves por la noche. Sin embargo, no se reportaron enfrentamientos con la policía como los que ocurrieron cuando Sánchez sostuvo una reunión con los miembros del Gabinete en Barcelona en diciembre de 2018.
El rey Felipe no se refirió específicamente a las protestas cuando habló en el evento de los premios, pero sí hizo un llamado a la unidad a fin de fomentar estabilidad para los negocios.
El mismo viernes, Torra y los exlíderes catalanes Carles Puigdemont y Artut Mas hablaron juntos en Perpignan, Francia, para denunciar lo que consideraban era un trato injusto por parte de las autoridades españolas. Puigdemont, miembro del Parlamento Europeo, es buscado por las autoridades españolas por su participación en el fallido intento de secesión de 2017. Mas también fue declarado no apto para ocupar un cargo público luego de que en 2014 sostuvo una votación no autorizada sobre la independencia de la región.
El movimiento separatista de Cataluña, que es apoyado por aproximadamente la mitad de los 7,5 millones de sus residentes, quiere crear una república para la próspera región del noreste de España.