Crecen diferencias entre presidente y su vice en Guatemala
CIUDAD DE GUATEMALA (AP) — Las diferencias entre el presidente de Guatemala y su vice parecen ahondarse cada vez más.
Si bien hasta hace varios meses el distanciamiento entre el mandatario guatemalteco Alejandro Giammattei y su vicepresidente Guillermo Castillo era un secreto a voces, en los últimos días las diferencias entre ambos son más evidentes y públicas.
El último incidente protagonizado surgió el martes, al hacerse público un chat del gabinete presidencial en el que Castillo reclama la premura en una convocatoria de la secretaria general del presidente Lelya Lemus, a la cual el vicepresidente respondió que no acudiría.
Un enfurecido Giammattei dijo a una emisora de radio local que “nadie esperaba una respuesta de esa calaña... si alguien se ha estado rascando la barriga pues entonces que exponga o se quede con la boquita callada, pero que no venga a decir en este momento que se esta apresurando”.
“Si el señor tiene diferencias, que venga al consejo de ministros y las exponga, pero que no agarre su chat y lo mande a un periódico para tratar de hacerse víctima, que no es víctima”, dijo el presidente. Castillo no respondió a lo dicho por el gobernante.
Giammattei fue más allá al anunciar que denunciaría la filtración del chat de gabinete por ser algo de “seguridad nacional”.
Castillo, un abogado y allegado al sector empresarial, llegó al poder junto a Giammattei por el partido Vamos, pero pronto se hizo evidente que mantienen distancia, aunque el vicemandatario asegura que es por cuestión de agendas apretadas.
Una situación tan grave como que el presidente anunciara que está enfermo de coronavirus no le fue comunicada directamente al vice. “Me enteré por las redes sociales”, afirmó Castillo, de 54 años.
Giammattei, de 64 años, también pronto dejó en claro que no cedería su mandato mientras estaba enfermo y que seguiría trabajando. El presidente, que padece de esclerosis múltiple, hipertensión y tiene un marcapaso, aseguró que sus síntomas eran leves y que estaba saliendo de la enfermedad.
Los críticos reclaman que la distancia entre Giammattei y Castillo hizo que el presidente le restara funciones que fueron delegadas a Centro de Gobierno, una entidad dirigida por un joven amigo personal del presidente.
Castillo asegura que las funciones que la ley y la constitución le delegan, él sigue manteniéndolas, además señala que le interesa mucho mantener comunicación con las comunidades rurales para conocer sus problemas.
El vicepresidente se queja que no se le invita a las inauguraciones de obras públicas, a las reuniones en que los ministros rinden informes al presidente y que incluso el canal oficial de gobierno no cubre las actividades públicas suyas.
“Más allá de que exista o no una buena relación, que es importante, creo que lo que debe privar es que las acciones de gobierno se cumplan y den resultados”, señaló Castillo.
Mientras tanto, se siguen generando críticas a la gestión de gobierno de Giammattei en medio de la pandemia del coronavirus, que ha contagiado de momento a unas 85.681 personas y ocasionado la muerte a 3.124 en la nación centroamericana.