Los Rituales en las Bodas (Parte 3)

Les presento la última entrega de los rituales más comunes en la celebración de los matrimonios, para que los conozcan y decidan si los siguen o no en su propia boda.

Las amonestaciones.- Son el anuncio público de que va celebrarse una boda católica, para que, si hay alguien que tenga razones suficientes para que no se realice, lo manifieste y pueda impedirlo, antes de que se lleve a cabo. Las inició el Emperador Carlomagno el siglo I d.C., ya que en aquella época se realizaban muchos matrimonios consanguíneos, por lo que proliferaban los casos de hemofilia.

La diadema, tiara o tocado- Es una tradición muy antigua, que considera que, como la novia era "reina por un día", debía llevar una corona. También se usaba como símbolo de fertilidad. En nuestros días, es una remembranza estilizada de la guirnalda de flores, que preferentemente era de azahares y que llevaban todas las novias de la antigüedad, como protección de malos pensamientos.

La alfombra roja o el camino de pétalos de rosas.- Es una tradición francesa del silgo XVI. Representa el respeto, el honor y el deseo de una vida plena para la pareja, pues la realeza era quien la utilizaba. Los pétalos de rosa que se esparcen al principio de la ceremonia, son el deseo de que tengan un futuro dulce y feliz.

La marcha nupcial.-Es la música que abre y cierra la ceremonia religiosa y su tradición la originó la reina Victoria, al tocarla en su boda. Escogió la Marcha Nupcial de Félix Mendelssohn, que formaba parte de Sueño de una Noche de Verano, de 1826, obra del mismo nombre de William Shakespeare. Cabe señalar es considerada como pagana en las ceremonias católicas, por lo que muchas veces no se permite tocarla en la iglesia.

Entrega de la novia por su padre o ambos.- En la antigüedad, como las hijas eran consideradas una propiedad más de sus padres, sólo se casaban si ellos lo aprobaban y transferías la posesión, tanto de la hija como de sus bienes al novio. Al entregarlas en el altar, era señal de aprobación y que contaban con su bendición.

El beso después de la ceremonia.- Como los novios hacían el amor ante los ojos del pueblo, era para tener la certeza de que la novia era virgen y el matrimonio estaba consumado. Hoy sólo queda el beso, como símbolo de este acto.

El padrino del novio.- Su origen es sueco. Cuando no había suficientes jóvenes con quiénes casarse, secuestraban a las de otros pueblos, en compañía de sus amigos vestidos como el novio, para crear confusión... Como las ceremonias eran nocturnas, los padrinos se encargaban de iluminar la ceremonia con antorchas, brindando la luz de sus buenas intenciones, de manera metafórica.

Que la novia se coloque del lado izquierdo.- Cuando la novia era raptada, ésta se situaba a la izquierda del novio en el altar, para que el novio tuviera la mano derecha libre, para poder empuñar la espada y defenderse, en caso de que su familia quisiera rescatarla.

Arrojar arroz.-. Fue importada de Asía. Hay un proverbio chino que dice "Que tengan tanta prosperidad como para repartir arroz todos los días de sus vida y les sobre, para darlo a los que no lo tienen." Los sumerios lanzaban trigo a los novios para simbolizar la procreación y fertilidad, diciendo las palabras de "que se produzcan hijos de la misma manera que se produce pan". Años después, se sustituyó el trigo por el arroz, unificando así su simbolismo. Hoy en día, muchos templos que prohíben esta práctica, por considerar que se desperdicia la comida.

El pastel de bodas.- Viene de los romanos. Una vez celebrada la boda, se partía un pan sobre la cabeza de la novia, como símbolo de abundancia, larga vida y de fertilidad, al considerar al trigo como símbolo de fertilidad. Sus invitados creían que las migajas que caían eran de buena suerte, por lo que las recogían y se las comían. Esto evolucionó y llegó a Inglaterra en la Edad Media, cuando se repartían canastitas con galletas entre los invitados y si sobraban, se entregaban a los pobres.

Más tarde, los invitados regalaban a los novios pequeños pasteles que amontonaban en una mesa. Los novios los besaban, les añadían una capa de azúcar glass y se distribuían entre los invitados. Es por esto que los pasteles de bodas actuales tienen varias capas.

Levantar a la novia en brazos para cruzar el umbral.- También tiene su origen en el rapto de las novias, porque se las llevaban en vilo. Era una señal de que la novia se entregaba gustosa a su marido. Los romanos pensaban que si la novia tropezaba al entrar al nuevo hogar era de mala suerte, por lo que se hacía para protegerla de los malos espíritus que pudieran estar escondidos detrás de la puerta del nuevo hogar.

Las despedidas de solteros.- Su origen es alemán y comenzó cuando un hombre pobre se enamoró de una joven de posición acomodada y como el papá de la novia prohibió la relación, se negó a darle la dote. Ante esta situación, los amigos de la pareja se unieron para regalarles todo lo que necesitaban y pudieran así montar su casa. Para el siglo XX, en América Latina y en otros países, las despedidas de solteros se convirtieron en dos fiestas independientes y distintas.

La Luna de Miel.- También es de origen teutón y señala la nueva etapa de los esposos, cuando dejan a su familia y sus amigos, para empezar su vida de casados. Se celebraban las bodas en Luna llena, como símbolo de buena suerte y también, porque se creía que en la Luna estaba el Dios del matrimonio, que los bendecía, al casarse en esa época. Después, los novios bebían licor de miel virgen por 30 días, un poderoso afrodisíaco, según ciertas leyendas.