Asesinatos de refugiados en Uganda alarma a la ONU
KAMPALA, Uganda (AP) — La agencia de refugiados de Naciones Unidas dijo estar “triste y alarmada” después de que al menos 10 refugiados fueran asesinados en un ataque la semana pasada de residentes locales en el norte de Uganda, en medio de tensiones por una creciente escasez de recursos.
Al menos otras 19 personas resultaron heridas, incluido un miembro de la comunidad en el asentamiento de refugiados de Rhino. Quince casas de refugiados quedaron destruidas y otras 26 fueron saqueadas y sufrieron actos vandálicos, indicó la agencia en un comunicado.
Diez refugiados seguían desaparecidos, según el comunicado del organismo, que pidió a las autoridades locales que “los busquen de inmediato”. La agencia trabajaba con las autoridades para investigar el suceso y “aclarar las circunstancias, incluido el papel de las autoridades locales”.
Un portavoz de la policía no hizo comentarios en un primer momento.
Hace años que se reportan incidentes esporádicos de violencia en asentamientos que acogen a cientos de miles de refugiados de la vecina Sudán del Sur, incluidos choques entre los miembros de grupos étnicos. Pero la violencia rara vez deja muertos.
Aunque Uganda ha sido elogiada por mantener las puertas abiertas a los refugiados, las autoridades advierten de la carga que soportan los recursos locales, y algunos funcionarios han dicho que la comunidad internacional no está prestando suficiente apoyo.
El país africano acoge ahora a más de 1,4 millones de refugiados, la mayoría de Sudán del Sur. Normalmente, los refugiados reciben terrenos dentro de un esfuerzo por integrarlos en las comunidades anfitrionas.
Pero han crecido las tensiones debido a las reducciones de financiamiento que forzaron al Programa Mundial de Alimento a reducir en un 30% las raciones de alimentos o transferencias de efectivo en abril. La agencia dijo en agosto que la pandemia del coronavirus había mermado sus recursos, advirtiendo que “se verá obligada a recortar más en los próximos meses” si no recibía más dinero.
“La reacción desproporcionadamente violenta de la comunidad anfitriona a una disputa local refleja una amenaza para el delicado equilibrio de coexistencia pacífica en los poblados rurales donde viven los refugiados junto con sus anfitriones ugandeses”, dijo Joel Boutroue, representante en Uganda de la agencia de refugiados de la ONU.
El último incidente violento es “alarmante”, dijo, porque los refugiados, al igual que las comunidades anfitrionas, “afrontan crecientes dificultades y cada vez menos acceso a servicios básicos y medios de vida”.