Apoyado por antecesores, Alex Fernández refresca el mariachi
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Como tercera generación de una dinastía de intérpretes de música regional mexicana, Alex Fernández nunca dudó seguir los pasos de su padre y su abuelo, Alejandro y don Vicente Fernández.
“No me imaginaba cantando otra cosa más que este género”, dijo en una entrevista reciente por videollamada desde Guadalajara. “Al principio mucha gente me decía que era pésima idea, que era un género que no era para mí, que era para gente grande, para otra generación, que era un género que se estaba muriendo”.
El cantante de 26 años, que en 2019 debutó con el álbum “Sigue la dinastía”, lanzó recientemente un nuevo sencillo muy mariachi, “Lo que tú necesitas”, producido al igual que su primer álbum por su abuelo. Es un alegre tema de amor compuesto por Gustavo Cuauhtémoc y Jorge Domínguez, que dice “lo que tú necesitas es alguien que ponga tu piel chinita / que goces, que aprietes, que te derritas”.
El video se filmó durante la pandemia y muestra a bailarines de danza regional mexicana, mariachis e impresionantes trajes de charro. Tras haber hecho videos animados para sus sencillos anteriores (“Te lo digo porque te conozco” y “El tiempo no perdona”), tenía ganas de mostrar a México, su “folclor y colores”.
Apoyado por sus predecesores, el joven Fernández dice que quiere “refrescar el mariachi” para llevarlo a las nuevas generaciones.
Planea lanzar otras canciones en lo que resta del año, varias de ellas grabadas durante la pandemia, y prepara un álbum en el que habrá variedad, desde temas bailables a otros más románticos y unos más de desamor.
“Estoy muy contento de ver la reacción que ha tenido la gente”, dijo. “Esperemos que les guste todo el disco, porque está padrísimo de verdad”.
Fernández estudió administración de empresas y heredó la vena musical no sólo de su familia paterna: “Muchísima gente no lo sabe, pero del lado de mi mamá (América Guinart), mis dos abuelos cantan profesionalmente y todas mis tías — mi mamá sólo tiene hermanas — cantan, todas tocan instrumentos. Nací con la música en mi vida”.
Una de esas tías, de hecho, fue quien le enseñó a tocar el piano. También era muy bueno para cantar, pero dice que al principio era muy tímido. Sus padres le pedían que cantara en fiestas, pero él se negaba. Su hermana Camila, en cambio, se moría por cantar en público. Fue precisamente para no obstaculizar la carrera de ella que su padre le dijo, cuando él tenía unos 17 años, que esperara para hacer su debut musical.
Tiempo después, para un Día de las Madres, su abuelo les ofreció a Fernández y otros nietos su estudio para que grabaran algún tema para sus mamás y se sorprendió al escuchar su voz de tenor lírico completamente desarrollada.
“Sin preguntarme me dijo que él me iba a manejar, me iba a hacer el disco y me iba a lanzar de cantante”, contó.
Contar con el respaldo de Vicente Fernández es tan sólo un sueño para la mayoría de los aspirantes a cantantes de música regional mexicana, pero el que sea su abuelo no ha implicado que sea trabajo fácil.
“Mis estudios fueron con mi abuelo”, dijo Fernández. “Es súper estricto, es muy disciplinado... Nos llevamos súper bien, pero estamos siempre estirando la liga lo más que podamos para poder igual avanzar tan rápido como lo hemos hecho”.
Y hay un segundo filtro en la producción: su padre, Alejandro Fernández, quien también les da sus observaciones cuando están en el estudio y desata el lado perfeccionista de Alex.
“Mi papá siempre es el que me da las críticas más duras”, dijo, aunque agregó que últimamente se ha dado oportunidad de felicitarlo también.
En cuanto a su hermana Camila, quien en 2017 se lanzó como cantante de R&B, la joven de 22 años hizo noticia en agosto al casarse con Francisco Barba en una boda que la familia deseaba que fuera discreta, pero a la que llegaron decenas de cámaras y con ello también fuertes críticas en las redes sociales.
Fernández dijo que en Guadalajara se están haciendo bodas y que trataron de seguir las medidas de salubridad lo más posible. Su abuelo, quien tiene 80 años y ha padecido cáncer, no asistió al enlace.
“Éramos como unas 200 personas y decían que 1.500 personas”, dijo. “La mayor parte del tiempo traíamos cubrebocas, todo era con las mayores medidas de limpieza”.
A los novios les deseó mucha felicidad, pero él por ahora defiende su soltería.