Lo Que los Hombres Quieren Pero No Admiten
Desafortunadamente, siempre se ha pensado que los hombres, tienen que ser fuertes, valientes, reservados y sobre todo, sin necesidades. Por fortuna, este concepto está evolucionando pues se ha demostrado que lejos de ser bueno, es profundamente dañino y sobre todo, no permite ver lo que realmente son: seres humanos maravillosos y únicos. En base a lo anterior, les comparto algunos aspectos que buscan de una mujer, en una relación.
- Siempre se les ha dado el estereotipo de ser la base sólida en una pareja, pero francamente es un papel que cansa mucho, los frustra y hasta los deprime cuando no lo cumplen, en especial cuando los problemas se presentan. Al no hacerlo, pueden sentirse impotentes, frustrados y menos valiosos. Cuando encuentran una compañera que los entiende, no los presiona, puede intercambiar papeles con él sin problemas y sobre todo, no se los reprocha, es como si se sacaran la lotería.
- Requieren que su pareja los acompañe en todos los momentos de la vida. Es muy fácil hacerlo cuando los tiempos son buenos, pero la verdadera prueba se presenta cuando no lo son tanto, como también no están mostrando su mejor cara al mundo, resultado de presiones, carencias, miedos y problemas. Así, si tiene a alguien que no sólo lo aliente en la lucha diaria, sino que también le ayude a salir victorioso en esa lucha, se vuelve invaluable.
- Hay ocasiones en que el mundo digamos, no es tan amigo de ellos como se supone, por lo que necesitan apoyo para poder enfrentarlo. Y no solamente se refiere a un apoyo tácito sino sobre todo discreto, ese que cuando se está en público en incondicional para defenderlos y ponerse de su lado y en privado, es capaz de mostrar los errores sin cuestionar en ningún momento sus capacidades, para retomar su confianza en ellos mismos.
- Si de alguien necesitan el visto bueno, es el de ella, siempre y cuando sea sincero y no una estrategia más para enamorarlo o simplemente decir que lo pescaron y continuar con la próxima víctima en su lista o verlos como una máquina de hacer dinero. Es decir, que con sus comentarios y crítica constructiva le ayude a mejorar, sin burlas, comentarios hirientes o peor aún, ironías venenosas que solamente minan su autoestima.
- ¿Cuántas veces se rompen relaciones por no dejar ir los problemas, las discusiones, los reproches y sobre todo, la contabilidad?. No, no hablo de esas que hablar de deber y haber, sino de esa lista interminable de deudas pendientes por cobrarles y que parecen nunca perder vigencia, a pesar de ser del siglo pasado y de las interminables disculpas y explicaciones que se han presentado como satisfacción. Hay que darle vuelta a la página y continuar el camino que se han planteado juntos, si se quiere ser feliz.
- ¿Quién no aprecia una buena carcajada, de esas que nos relajan y nos hacen olvidar un mal rato, para darle la vuelta por completo? Hay que saber reírse de la vida y más de lo que se quiere, mientras la transitamos. Al no tomarnos todo en serio y no como si fuera un muy triste episodio, es mucho más llevadera, en tantos sentidos. Pero hay que tener el don de la oportunidad. Es decir, saber cuándo es el momento adecuado y evitar así que hasta una discusión a la que se quiere relajar, se vuelva lo contrario. No es burla sino ingenio.
- El estilo personal no sólo se aplica en cuanto a la forma de ser de cada uno de los miembros de la pareja sino también en la cama. ¿Recuerdan cuando una simple caja de arena se volvía nuestro patio de juegos? Pues es lo mismo pero en versión adulta y más divertida. Ese espacio y ese momento tiene que tener su sello particular, su momento para compartir y sobre todo su mejor secreto hasta un grito, pero que es solamente a dos voces.
- Antes de ser pareja, de alguna u otra forma fueron amigos. Esto no tiene por qué cambiar a lo largo de la relación. Por el contrario, tiene que consolidarse aún más, hasta llegarlos a convertir en compañeros y cómplices para lograr así construir una relación sólida, en la cual se puedan refugiar cuando hay tanta violencia a su alrededor. Pero también hay que saber cuándo respetar los espacios del otro y saber estar solos. Además es muy excitante enamorarse de su mejor amiga.
- El poder confiar en el otro, es un verdadero privilegio. Ya de por sí los caballeros enfrentan un mundo más hostil que el de nosotras y necesitan esa persona especial en la que pueden mostrarse sin disfraces y de manera auténtica, sin miedo a ser juzgados, recargar la pila, igual que un celular y tomar fuerzas, para continuar en la contienda diaria, mostrándose de la forma en que se espera se vean ante los demás. Es muy tranquilizante saber a ciencia cierta que puede confiar en ella plenamente y que no lo va a traicionar de ninguna forma.
- Lo anterior tiene que ser recíproco y dar paso a otro punto importante: la lealtad. Es ese compromiso mutuo de guardarse las espaldas, ya sea presencial o no. Esa certeza de que será su mejor porrista para hablar de sus cualidades y su mejor defensa para cuando se le ataca, que no le va a apuñalar la espalda de ninguna forma y que siempre estará alerta para evitar que los separen, no creerá en chismes infundados y siempre lo respaldará.
El mundo está cambiando y la forma de relacionarnos, también. No se sabe si es mejor o peor, pero si diferente. Es más humana, más realista y más benévola. Y aunque es cierto que hay muchas parejas que no se consolidan o peor aún, duran juntas un suspiro, también las hay aquellas que se comprometen y luchan por vencer obstáculos para permanecer juntas, a pesar de todos los pronósticos, llegando inclusive a cumplir muchos años compartiendo la vida.}