Marchan por joven argentino desaparecido en cuarentena
BUENOS AIRES (AP) — La última imagen de Facundo Astudillo Castro con vida es de espaldas junto a una camioneta policial y un agente con tapabocas que lo sostiene del brazo en un retén al sur de la provincia de Buenos Aires.
La fotografía, cuyo autor se desconoce, data de fines de abril y es una de las pruebas que implican a la policía en la muerte del joven de 22 años en medio de la cuarentena por el nuevo coronavirus en Argentina.
Mientras la familia y organismos de derechos humanos denuncian que Castro es otra víctima de violencia institucional que salpica a la democracia en Argentina, su caso desató tensión en el seno de la coalición de gobierno de Alberto Fernández.
Este jueves el centro de Buenos Aires y otras provincias fueron escenario de movilizaciones para exigir justicia y reclamar la renuncia del ministro de Seguridad de la provincia de Buenos Aires, Sergio Berni, un funcionario que dice responder al liderazgo político de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.
“Estamos ante un crimen de triste memoria, una nueva desaparición forzada seguida de muerte. Por eso reafirmamos que el Estado y el gobierno son responsables”, señaló el documento leído por activistas del Encuentro Memoria, Verdad y Justicia al finalizar una marcha en la histórica Plaza de Mayo.
Al frente de la movilización de la que participaron varios cientos de militantes de organismos de derechos humanos, organizaciones sociales, de trabajadores y partidos de izquierda desde el Congreso había un cartel gigante con el mensaje: “Por Facundo juicio y castigo a los culpables, fuera Berni”.
Astudillo Castro desapareció a poco de imponerse la cuarentena luego de partir de la localidad de Pedro Luro, donde residía, hacia Bahía Blanca, para reconciliarse con su exnovia.
Los restos humanos fueron hallados en un canal de agua en Villarino Viejo, cerca de Bahía Blanca, en avanzado estado de descomposición, a dos kilómetros de una vía de ferrocarril en desuso.
Tras una autopsia de la que participó el Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF), la justicia confirmó el miércoles que los restos pertenecen al joven pero no reveló la causa de la muerte.
Hasta el momento no hay imputados en el caso.
El presidente Fernández, quien recibió a la madre del joven, dijo la víspera en una entrevista a la televisión que “lo primero que debo hacer es solidarizarme con Cristina (Castro) y estar a su lado. Yo quiero tanto como ella saber qué pasó con su hijo. Estamos pidiendo que se investigue bien”.
El mandatario nada dijo sobre el rol de Berni en el caso. El ministro de seguridad ha dicho que no hay elementos en la causa judicial que incriminen a la policía.
Las denuncias sobre casos de abusos de las fuerzas de seguridad son frecuentes en Argentina, donde la represión ilegal causó miles de víctimas durante la última dictadura militar (1976-1983).
Según los organizadores de la marcha del jueves, se cometieron 102 asesinatos a manos de fuerzas policiales durante la cuarentena. El ministerio de Seguridad reconoció que investiga unos 40 casos de violencia institucional.
