Ronaldinho viaja a Brasil tras salir libre en Paraguay
ASUNCIÓN (AP) — Ronaldinho viajó el martes a su natal de Brasil tras pasar casi seis meses detenido en Paraguay por usar un pasaporte falso.
El retirado astro del fútbol salió de Paraguay en un vuelo privado. Como las fronteras del país están cerradas por la pandemia de coronavirus, la aeronave, propiedad de un empresario local, recibió un permiso especial de las autoridades.
A la salida del hotel de cuatro estrellas, en la capital Asunción, en donde estuvo con prisión preventiva durante 140 días, Ronaldinho fue despedido por un bullicioso grupo de personas que corearon su nombre y le aplaudieron.
El ex del Barcelona, Paris Saint-Germain y Milan, entre otros clubes, viajó acompañado de su hermano Roberto de Assis Moreira y su abogado brasileño Sergio Queiroz.
Antes, en su cuenta de Instagram, Ronaldinho publicó una fotografía suya con el exdefensor paraguayo Carlos Gamarra, quien jugó en los clubes brasileños Internacional, Corinthians y Flamengo: “Gracias por su visita y por todo el apoyo en esta fase difícil mi amigo Carlos Gamarra”, escribió.
Los hermanos, detenidos a inicios de marzo, recuperaron su libertad el lunes último en un proceso abreviado, por resolución del juez de garantías Gustavo Amarilla y un acuerdo con la fiscalía. Antes de ingresar a un hotel, estuvieron recluidos durante 31 días en el cuartel antimotines de la policía.
Amarilla firmó una sentencia suspendida de dos años de cárcel para Roberto y de uno para Ronaldinho, más el pago de multas de 110.000 y 90.000 dólares, respectivamente.
Ambos admitieron haber utilizado pasaportes de contenido falso para ingresar el 5 de marzo pasado a Paraguay para cumplir varias actividades comerciales.
Supuestamente, Ronaldinho fue invitado por una fundación local para presentar su autobiografía y apoyar una escuela para niños pobres, además de participar en la apertura de un casino.
Los abogados defensores Tarek Tuma y Alcides Cáceres informaron al juzgado que sus clientes fijarán residencia permanente en Río de Janeiro.
El juez Amarilla, que consideró como donativos las multas, informó que se usarán en el fortalecimiento de los sistemas médicos de combate al coronavirus en cárceles públicas, un hospital para pobres y el tratamiento de una niña con atrofia muscular espinal.