Liga de Campeones termina con final Bayern-PSG
LISBOA (AP) — Luego de una suspensión sin precedentes de la competencia, cambios forzados por la pandemia y un cambio de sede de la final, la Liga de Campeones concluye el domingo — 425 días después de que se jugó el primer partido.
O Paris Saint-Germain se lleva la copa europea por primera vez en su historia o Bayern Múnich lo hará por sexta vez.
Y apenas unos pocos centenares de personas, incluyendo a los jugadores y árbitros, podrán estar presentes en la final, que se juega en Lisboa a finales de agosto en lugar de Estambul en mayo, como estaba programado.
Nunca antes se ha disputado una copa europea en un ambiente tan vacío. Ausentes están las usuales congregaciones de decenas de miles de hinchas en a ciudad anfitriona. Solamente el gran trofeo en Rossio — la principal plaza de Lisboa — indica que el mayor partido del fútbol de clubes en el mundo se celebra en la capital portuguesa.
Alrededor del estadio de Benfica, no hay un solo cartel que indique que un duelo que va a ser visto por televisión por centenares de millones de personas el domingo por la noche se jugará adentro.
La alta de atmósfera en esta 65ta final del máximo trofeo europeo de clubes no restará importancia a la magnitud de la ocasión para los dos equipos. Por primera vez desde 1998, la final es un duelo entre dos equipos que se calificaron como campeones de sus ligas.
LA MISIÓN DEL PSG
Celebrando el 50to aniversario de su fundación — tras la fusión de clubes parisienses — el PSG es más joven que la copa, que tiene 65 años. Convertirse en campeones europeos sería el cumplimiento de una jornada de nueve años de cuantiosas inversiones desde que el estado de Qatar compró el club.
“Serán los 90 minutos más importantes de nuestras vidas como futbolistas y de la historia del club", dijo Marco Verratti, que ha estado ocho años en el PSG.
Más de 1.000 millones de dólares de inversiones en jugadores — incluyendo los 222 millones de euros para firmar a Neymar en el 2017 — han convertido al PSG e una fuerza tan dominante en Francia que las temporadas allí se han vuelto una procesión. Siete de los últimos ocho títulos de la liga han sido capturados por el club y cuatro de las últimas seis campañas han terminado con dobletes para el club.
Pero el PSG se ha vuelto sinónimo de sus colapsos en la Champions, incapaz de llegar a semifinales por un cuarto de siglo hasta este mes en Lisboa.
LA MISIÓN DEL BAYERN
Desde que ganó la Liga de Campeones por quinta ocasión en el 2013, Bayern ha perdido cuatro semifinales — dos veces contra el 13 veces campeón Real Madrid, una ante Atlético de Madrid y otra ante Barcelona.
Fundado en 1900, Bayern se estableció como un superclub mucho antes de que estados comenzasen a invertir en el fútbol. Mientras que el PSG es una extensión del poder del emir de Qatar Tamim bin Hamad Al Thani, en Bayern son los hinchas quienes controlan el club por medio de un masivo sistema de membresía.
Pero una cuarta parte de las operaciones son propiedad de Adidas, el gigante de seguros Allianz y el fabricante de autos Audi. Y la aceptación de patrocinio de la estatal Qatar Airways desde el 2018 ha atraído críticas al club por activistas de derechos humanos por aceptar financiamiento de una nación en la que inmigrantes sufren condiciones laborales inhumanas.
CAZA DE GOLES
Bayern es una formidable unidad ofensiva. Mientras que el PSG ha anotado 25 goles en 10 partidos en ruta a su primera final, Robert Lewandowski y Serge Gnabry tienen 24 entre os dos, como parte del total de 42 de Bayern.
Con 15 goles y seis asistencias en Europa, Lewandowski disfruta a los 32 años de una de sus mejores temporadas. Solamente Cristiano Ronaldo — con 17 goles por Real Madrid en la campaña 213-2014 — ha anotado más en la Champions.
“Lewandowski ha estado increíble", dijo el volante de Bayern Kingsley Coman. “Ha sido el mejor jugador de la campaña y del mundo”.
Pero no estará en contienda por el Balón de Oro luego que France Football suspendió el galardón esta temporada debido a la pandemia de coronavirus, que hizo que se cancelase la liga francesa y se declarase campeón al PSG.
¿Pudiera ser revertida esa decisión si PSG se convierte el el primer campeón europeo de Francia desde que Marsella ganó en 1993?
Kylian Mbappé y Neymar ciertamente serían fuertes candidatos al Balón de Oro. Angel Di María pudiera er considerado también tras revitalizar su carrera en el club francés uego d euna temporada miserable con Manchester United en la campaña 2014-2015, con un gol y dos asistencias en la victoria en semifinales contra Leipzig.
Pero los jugadores del PSG no se han acercado a las cualidades letales de Lewandowski ante la puerta. Mauro Icardi y Mbappé tienen apenas cinco goles cada uno en la Liga de Campeones, aunque Mbappé ha contribuido con cinco asistencias.
EN LA ZAGA
La victoria de 3-0 de Bayern sobre Lyon en semifinales fue convincente, pero fue solamente la mala puntería del equipo francés lo que le previno ponerse adelante. Pudiera ser costoso si David Alaba y Jerome Boateng, en la defensa central de Bayern, dejan demasiado espacio para Mbappé, Di María y Neymar.
Y pudiera ser una noche final incómoda con la camiseta del PSG para Thiago Silva — junto a Presnel Kimpembe — con Lewandowski buscando aumentar su total de 55 goles en la temporada.
EN LAS BANCAS
Es un duelo entre técnicos alemanes.
Hansi Flick solamente asumió las riendas de Bayern en noviembre, ganando la promoción luego que Niko Kovac fue despedido con el equipo cuarto en la Bundesliga: la recuperación subsiguiente ti¡uvo al Bayern ganando su octavo cetro consecutivo en la liga, levándose la Copa de Alemania y avanzando a la final de la Champions por primera vez desde el 2013.
¿Estaría Thomas Tuchel aún a caro del PSG de no haber sido por la recuperación de último minuto para eliminar a Atalanta en cuartos de final en Lisboa hace casi dos semanas? Ganar títulos en Francia es lo mínimo que se espera de Tuchel. En su segunda campaña en París, el ex técnico de Borussia Dortmund será juzgado por su récord en Europa por los dueños qataríes.