Google: australianos podrían perder servicios gratuitos
CANBERRA, Australia (AP) — Google advirtió el lunes que el plan del gobierno australiano de hacer que las grandes empresas digitales paguen por contenidos noticiosos pone en riesgo los servicios gratuitos para los usuarios en Australia y sus datos podrían ser entregados a medios de comunicación.
La advertencia de la compañía estadounidense —incluida en una “carta abierta a los australianos”— se hizo una semana después de que cerraran las consultas públicas sobre propuestas de leyes que podrían obligar a Google y Facebook a pagar por noticias tomadas de medios de comunicación comerciales.
“Una ley propuesta… nos obligaría a proveerles un Google Search y YouTube dramáticamente peor, podría ocasionar que sus datos sean entregados a grandes empresas de medios y arriesgaría los servicios gratuitos que usan en Australia”, escribió Mel Silva, director de Google Australia y Nueva Zelanda.
Google es propietario de la plataforma de videos YouTube.
Tanto Google como Facebook se han opuesto a la ley propuesta, que fue develada el mes pasado y cuyo objetivo es lograr lo que otros países no han podido: compensar a los medios de comunicación por su contenido noticioso.
Rod Sims, presidente de la Comisión para la Competencia y Consumo de Australia, el organismo regulador que escribió las leyes, dijo que la carta de Google contiene información errónea.
“A Google no se le exigirá que cobre a los australianos por el uso de sus servicios gratuitos como búsquedas de Google y YouTube, al menos que opte por hacerlo”, dijo Sims en un comunicado.
“A Google no se le exigirá que comparta datos adicionales de usuarios con medios de comunicación australianos al menos que opte por hacerlo”, agregó.
Google añadió en un comunicado posterior que los servicios gratuitos estaban en riesgo en Australia porque las leyes propuestas eran “inviables”. Google dijo que no tenía la intención de cobrar a los australianos por esos servicios.
El tesorero australiano, Josh Frydenberg, dijo en un comunicado que la ley “sigue abierta a consulta, dando una oportunidad para que las empresas mediáticas y plataformas digitales aporten retroalimentación” hasta el 28 de agosto.