Georgia: Permiten ordenar el uso de mascarillas
ATLANTA (AP) — El gobernador de Georgia, que se ha opuesto a la emisión de órdenes locales para el uso obligatorio de mascarillas e incluso impugnó una judicialmente en Atlanta, ha firmado una nueva orden ejecutiva que permite a los gobiernos locales imponer su uso para contribuir a la lucha contra la pandemia de coronavirus.
Al igual que con órdenes previas, la emitida el sábado dice que “se alienta encarecidamente” a los habitantes y visitantes en el estado a que utilicen mascarillas cuando salgan de sus viviendas, salvo cuando estén comiendo, bebiendo o ejercitándose al aire libre. Sin embargo, a diferencia de órdenes anteriores, la actual autoriza a los gobiernos locales de los condados que hayan registrado el “umbral mínimo” a imponer el uso de mascarillas en instalaciones propiedad del gobierno.
Un condado llega a ese umbral si acumula 100 casos confirmados o más de COVID-19 por cada 100.000 habitantes en los últimos 14 días. Sólo dos de los 159 condados de Georgia están abajo de ese umbral, según información del Departamento de Salud Pública del estado.
El uso obligatorio de mascarillas no puede resultar en multas, cargos o sanciones contra los negocios u organizaciones privadas, y los castigos a las personas por incumplimiento no pueden incluir una multa mayor a 50 dólares ni tiempo de prisión, se afirma en la orden. Si hay gente que no las usa, las autoridades deben advertirle “sobre los riesgos para la salud que implica no llevar puesta una mascarilla u otra protección facial” antes de entregarle un citatorio.
El uso obligatorio de cubrebocas por disposición local no puede imponerse en propiedad residencial, y sólo puede ordenarse en propiedad privada, incluidos negocios, si el propietario u ocupante aceptan la medida, según la orden.
“Esta orden también protege a los negocios de Georgia de las extralimitaciones del gobierno al restringir la aplicación y vigilancia de los requisitos locales para el uso de cubrebocas a la propiedad pública", dijo Kemp en un comunicado que acompaña al decreto, el cual estará vigente hasta el 31 de agosto. “Si bien yo apoyo los controles locales, deben estar equilibrados adecuadamente con los derechos de propiedad y las libertades personales”.
Adicionalmente, la orden amplía los requisitos de confinarse para las personas que reúnan criterios específicos que resulten en un “mayor riesgo de enfermedad grave”, como personas en asilos o instalaciones de cuidados de largo plazo, gente con ciertas afecciones crónicas y la que tenga su sistema inmunológico en mal estado u otras afecciones que la hagan más vulnerable al coronavirus.