Scale Capital compra filiales de DirecTV en Venezuela
CARACAS (AP) — La compañía de inversión Scale Capital S.A. anunció el viernes la compra de las filiales venezolanas de la empresa de televisión por suscripción DirecTV y restituyó el servicio en Venezuela luego de que fue suspendido en mayo, lo cual afectó a más de dos millones de clientes.
Scale Capital S.A. indicó en un comunicado que llegó a un acuerdo con DirecTV Latin America LLC y que prestará el servicio utilizando la infraestructura instalada de DirecTV Venezuela.
La empresa precisó que se encuentra completando la compra de las acciones de Galaxy Entertainment de Venezuela SAT III R C.A y Galaxy Entertainment de Venezuela, C.A., que eran las compañías que manejaban el servicio de televisión por suscripción en la nación suramericana.
Como parte del acuerdo, Scale Capital informó que el servicio de televisión satelital se reactivará de manera automática en las próximas horas a todos los clientes en Venezuela, que lo recibirán gratis durante 90 días. En el escrito no precisó el monto de la operación ni cómo ni cuánto se cobrará por el servicio a los clientes venezolanos después de que concluya el período gratuito.
El director general de Scale Capital, Jacopo Bracco, dijo que “estamos muy ilusionados con este lanzamiento" y agradeció a todas las partes el apoyo recibido.
La estatal Comisión Nacional de Telecomunicaciones (Conatel) confirmó que Scale Capital restituyó la señal de la empresa de televisión por suscripción, e indicó en su cuenta de Twitter que la decisión “cumple" con las disposiciones legales que dictó el Tribunal Supremo de Justicia sobre el caso. Las autoridades venezolanas no informaron si se mantendrán las exigencias legales sobre el porcentaje de medios estatales y locales que llevaron a DirecTV a retirarse del país.
Durante una transmisión de la televisora estatal el viernes, el presidente Nicolás Maduro señaló que la reconexión del servicio de DirecTV se inició con respeto a las leyes venezolanas, y dijo esperar que Venezuela siga fortaleciendo sus sistemas televisivos.
Por su parte, el líder opositor Juan Guaidó celebró el regreso de la señal de DirecTV y dijo en un comunicado, difundido por su oficina de prensa, que “tras diversos esfuerzos y exploraciones, la empresa estadounidense AT&T decidió vender la operación de Venezuela a terceros, que han sido seleccionados por AT&T de manera independiente”, sin la participación de su administración ni del gobierno de Donald Trump, que es estrecho aliado de Guaidó.
La corporación AT&T informó en mayo que su filial DirecTV cesaba las operaciones en la nación suramericana debido a que era “imposible” que su empresa “cumpla con los requisitos legales” de Venezuela y Estados Unidos.
Por un lado, Washington había decidido no renovar una licencia que le había otorgado a AT&T para continuar transmitiendo el canal de noticias venezolano Globovision, propiedad de un empresario cercano al gobierno que es buscado en Estados Unidos por cargos de lavado de dinero, y el canal de la petrolera estatal Petróleos de Venezuela S.A., que también está sometida a sanciones.
Asimismo, DirecTV estaba obligada por las regulaciones locales a mantener en su parrilla de programación un porcentaje de al menos 8% de programas de medios estatales y locales que, con la salida de Globovisión y el canal de PDVSA, ya no podía cumplir, lo que podía acarrearle sanciones, según explicaron representantes del sector y analistas.
William Peña, periodista especializado en el área de telecomunicaciones, dijo que en torno a la operación de Scale Capital hay muchas dudas y habrá que esperar qué decide Estados Unidos sobre esta transacción en la que está implicada AT&T. Desde hace varios años Washington mantiene severas sanciones al gobierno de Maduro para presionarlo a que deje el poder.
El cese de operaciones de DirecTV, que era la mayor del país en el sector de televisión por suscripción, afectó a entre 6 y 12 millones de venezolanos, de los cuales 60% son de sectores pobres, los cuales se quedaron en medio de la cuarentena sin su principal fuente de entretenimiento e información.
Asimismo, unos 600 trabajadores de DirecTV quedaron desempleados en medio de una aguda crisis económica, agravada por una desbocada hiperinflación y una recesión que se ha profundizado en la pandemia del coronavirus.
Tras el cese de operaciones de DirecTV, el Tribunal Supremo de Justicia, controlado por el gobierno, ordenó la toma inmediata de todos los inmuebles y activos de la empresa. Las autoridades también detuvieron a tres exdirectivos.