COVID y desempleo afectan el empadronamiento latino en EEUU
PHOENIX (AP) — Cada día, Maico Olivares intenta comunicarse con unas 25 personas, principalmente de la comunidad latina en Estados Unidos, para convencerlas de que se registren para votar en las elecciones de noviembre. A veces lo consigue, pero resulta cada vez más difícil: muchos hispanos han perdido el empleo debido a la pandemia del coronavirus y les preocupa más alimentar a sus familias que prepararse para los comicios.
Olivares, como muchos otros promotores de los derechos de los latinos en todo el país, teme que entre los hispanos—fuertemente afectados por el contagio y el desempleo— habrá una elevada abstención este año.
“Lo que más les preocupa es el dinero y el alimento. No les preocupa tanto el voto”, dijo Olivares, dirigente de la campaña de empadronamiento de la organización del Centro de Arizona por una Economía sostenible, dedicada al activismo cívico y la justicia social.
El empadronamiento se ha reducido a una fracción de lo que era antes de la pandemia, cuando podían instalar sus mesas en actos públicos o en las aceras frente a las tiendas. Su objetivo era llenar 40.000 formularios de empadronamiento, pero han llegado apenas a 7.000, la mayoría antes de la pandemia. En la elección de 2018 reunieron más de 30.000 firmas y en la de 2016 unas 20.000.
Olivares dijo que tiene que hablar de su experiencia personal, hablar de su crianza como estadounidense de primera generación y padre de familia, para convencer a la gente que se empadrone. “A veces las cosas se ponen muy emotivoas, porque uno está hablando con la gente que más sufre”, dijo.
Los datos compilados a principios de junio por The Center for Election Innovation and Research (Centro para la Innovación e Investigación Electoral) indican que el empadronamiento de votantes en abril fue un 70% más bajo en 11 estados y Washington D.C. que para la elección presidencial de 2016.
Los latinos son un segmento codiciado por los dos partidos tradicionales, pero se han vuelto cada vez más importantes para el Partido Demócrata a medida que aumenta su población y su peso político. En todo el país representan el 13% de la población en condiciones de votar, pero la proporción es mucho más alta en Arizona y Florida, estados cruciales en la próxima elección. Los latinos son casi el 25% de los votantes empadronados en Arizona y el 20% en Florida.
Los grupos latinos habían puesto grandes esperanzas en la participación del sector este año, teniendo en cuenta que 11,7 millones de latinos votaron en las legislativas de 2018 comparado con 6,8 millones en 2014, pero hace dos años no había una pandemia mundial y una pérdida masiva de empleos que preocupara al electorado.
Si bien la tasa de mortalidad por COVID-19 es más alta entre los negros que en cualquier otro sector de la población, la de los latinos es casi tres veces más alta que la de los blancos ajustada por edad, de acuerdo con el laboratorio APM, que rastrea las tasas de mortalidad. La tasa de desempleo para los latinos fue de 14,5% en junio, tres puntos porcentuales por encima de la tasa nacional, de acuerdo con la Oficina de Estadísticas Laborales.
El coronavirus ha obligado a los grupos promotores del voto a aplicar el ingenio. Algunos se han asociado con bancos de alimentos o ayudan a la gente a solicitar prestaciones por desempleo. Otros han creado programas de ayuda para los desempleados o creado líneas telefónicas para dar información confiable a quienes no hablan inglés.