Más jugadores de los previstos renuncian a campaña de NFL
Ahora queda claro por qué uno de los principales temas en las discusiones entre la NFL y el sindicato de jugadores fue la posibilidad de que los agremiados se mantuvieran al margen de la próxima campaña.
Más de una treintena de jugadores han renunciado ya a disputar la temporada de 2020 en la NFL. Y de ningún modo es por el dinero, pues quienes toman esa decisión reciben un estipendio de 150.000 dólares.
La cifra aumenta a 350.000 en caso de que el jugador en cuestión presente condiciones médicas que lo pondrían en mayor riesgo si contrajera el coronavirus.
Pero en cualquiera de los dos casos, las compensaciones distan mucho de los montos que suelen percibirse en la NFL.
Así que las decisiones están motivadas por salud y seguridad, de los jugadores y de sus familias.
Dont'a Hightower, linebacker de Nueva Inglaterra, es quizás el jugador más destacado que ha decidido no disputar la próxima temporada, por motivos que explicó mediante un comunicado en las redes sociales.
“Sí siento que ésta es la mejor decisión en este momento para mi familia”, dijo Hightower. "Estoy muy agradecido con este deporte, con mis compañeros y también con los entrenadores, y trataré de seguir liderando y ayudando en lo que pueda, pero 2020 ha sido un año desafiante para nuestro mundo.
“Espero que todos puedan seguir siendo una luz en estos tiempos oscuros. Que haya más luz y que vengan tiempos grandiosos”.
Por ahora, el número de renuncias a la campaña ha sido más alto en la NFL que en otros deportes. En las Grandes Ligas y en la NBA hubo apenas una docena de jugadores que optaron por no volver este año. La liga del hockey sobre hielo tuvo la mitad de esa cifra.
Los nombres más conocidos incluyeron a Buster Posey y David Price en el béisbol; Avery Bradley en el basquetbol, así como Travis Hamonic y Mike Green en la NHL.
En la NFL, la cifra parece encaminada a superar las de todas las demás ligas en forma combinada. En privado, algunos ejecutivos de la NFL han manifestado su sorpresa por ello.
El miércoles, el corredor titular de los Chiefs de Kansas City, Damien Williams, clave para su coronación en el último Super Bowl, advirtió que no jugará.
En un deporte donde abunda el contacto físico y donde las nóminas suelen igualar en tamaño a las del béisbol, el basquetbol y el hockey en forma combinada, no se sopesó mucho la posibilidad de jugar dentro de una “burbuja”.
Así, parece lógica la decisión de los jugadores que han preferido ser meros espectadores desde casa.
“Nosotros sí sabíamos que ésta era una posibilidad”, dijo Ben Watson, vicepresidente del sindicato, en declaraciones a la radiodifusora satelital SiriusXM NFL. “Es por eso que la NFLPA (Asociación de Jugadores de la NFL) peleó tanto por dar a los chicos la opción. Estamos en tiempos en que la gente no tiene respuestas para muchas cosas.
“Todos enfrentan situaciones diferentes, tal vez contractuales, quizá por las personas con las que viven. Hay chicos que viven fuera de la zona y tienen que viajar de vuelta a casa. Hay motivos muy variados para esto, y pienso que vamos a encontrar más de esto a medida que pase el tiempo”.