El Salvador retrasa la segunda fase de su apertura económica
SAN SALVADOR (AP) — Ante el alarmante incremento de contagios y fallecidos por el nuevo coronavirus en casi todo el país, El Salvador anunció el miércoles que retrasa al 20 de agosto la segunda fase de su reapertura económica.
Esta etapa ha sido suspendida ya en dos ocasiones. Originalmente estaba prevista para el 7 de julio, luego se trasladó al 21 de julio y, ahora, el presidente, Nayib Bukele, anunció la nueva demora “después de escuchar las opiniones de los expertos y, sobre todo, del Ministerio de Salud”.
Bukele pidió a la Asamblea Legislativa que decrete el régimen de excepción para que el gobierno pueda ordenar una cuarentena obligatoria en todo el país, pero los diputados no han querido discutir el tema antes de un receso de más de una semana por vacaciones.
En un comunicado, el mandatario dijo que es "inaudito" que en la Asamblea "no se ha tomado en cuenta el recurso político y jurídico que nos permita auxiliar a nuestra población y sobre todo a nuestro personal de salud en primera línea, que también públicamente han exigido que la ley sea considerada inmediatamente por los legisladores".
Según los fallos de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, el presidente no puede decretar una emergencia nacional ni una cuarentena como plantea, ya que esto le corresponde a la Asamblea Legislativa. La cámara está dominada por sus opositores del exguerrillero Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) y la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena).
El Salvador puso en marcha la primera fase de la reapertura económica el 16 de junio luego de casi tres meses de cuarentena. Pero ante el incremento acelerado de contagios y fallecimientos, Bukele anunció el 5 de julio que aplazaría 15 días el paso a la segunda fase, y el 19 de julio la demoró nuevamente.
Con la primera fase, los taxis convencionales y los reservados por apps volvieron a circular y se permitió la reapertura de la construcción, de las industrias manufacturera, textil y electrónica, de los centros comerciales para ventas en línea o por teléfono, y de restaurantes para pedidos a domicilio o para llevar.
En la segunda, podrán operar el transporte colectivo de pasajeros, los centros de llamadas, las industrias del plástico, el papel y el cartón, así como la del calzado, la cosmética, la manufacturera y creativas. Además se permitirán servicios empresariales y profesionales. En los centros comerciales abrirían los supermercados, farmacias, bancos, servicios públicos, de telefonía, cable e Internet, así como restaurantes y áreas de comidas en espacios abiertos y cerrados siguiendo los protocolos de saneamiento.
Con el sistema de salud público al límite, El Salvador registra 15.841 casos confirmados de COVID-19, la enfermedad causada por el coronavirus, con 430 fallecidos y 8.071 pacientes recuperados. Actualmente hay 7.340 casos activos, 487 en estado crítico y 1.061 graves.