Chile reduce confinamiento en algunas comunas
SANTIAGO, Chile (AP) — Chile anunció el viernes una rebaja en los grados de confinamiento en 41 de sus más de 300 comunas, incluidas algunas del gran Santiago, luego de una persistente baja de nuevos contagiados en un país que ocupa el octavo lugar del mundo con más infectados por millón de habitantes.
En siete de las 38 comunas del Gran Santiago sus residentes podrán salir libremente a la calle de lunes a viernes, mientras las restantes seguirán bajo una cuarentena total vigente hace nueve semanas, junto a un toque de queda de 22.00 a 05.00 horas que sigue activo en todo el país.
Tres de las comunas que relajarán el confinamiento a partir del martes próximo son las más acomodadas de la ciudad, algunas de cuyos residentes trajeron el nuevo virus al país al regreso de sus vacaciones en Europa a comienzos de marzo.
Chile vive desde hace varias semanas una disminución de casos nuevos, con una baja del 15% en los últimos siete días y un 30% en las últimas dos semanas. El país vivió en junio sus peores días de la pandemia, con miles de muertos y sus más de 2.400 camas críticas al borde del colapso, especialmente en el gran Santiago, donde viven ocho de los 19 millones de chilenos.
En contraste, cuatro comunas recibieron malas noticias y desde el martes se sumarán a las que están en cuarentena. En todo el país es obligatorio el uso de mascarillas.
En América Latina, Chile sólo está por debajo de Brasil, Perú y México en cantidad de contagiados, con más de 340.000 infectados y 12.000 fallecidos.
El inicio del relajamiento en algunas comunas se suma a otra medida muy importante: desde el sábado un millón de personas mayores de 75 años, confinadas estrictamente desde hace cuatro meses, podrán salir tres veces por semana durante dos horas —inicialmente el permiso era por una hora—, acompañadas de una persona.
En la región de La Araucanía, en el sur, que está sin cuarentena, se podrán abrir restaurantes, cines y cafés al 25% de su capacidad. También se podrá practicar deportes con restricciones y sin público, mientras en el gran Santiago todos los comercios seguirán cerrados.
Otras dos regiones del sur están libres de confinamiento desde hace un par de semanas: Los Ríos y Aysén, también en el sur, donde la densidad de la población es baja.
En la capital chilena, los favorecidos son cerca de 1,3 millones de personas que podrán laborar presencialmente si sus trabajos no están en comunas bajo cuarentena, y podrán participar en actividades sociales y deportivas con un máximo de cinco personas en lugares cerrados y 10 en zonas abiertas.
El ministro de Salud, Enrique París, advirtió que la relajación de medidas se puede revertir si aumentan los contagios.
Chile resistió la presión sobre el sistema hospitalario porque triplicó desde marzo las camas críticas y los ventiladores mecánicos, aunque la cantidad de nuevos contagiados escaló hasta 6.900 a mediados de junio, debido a una falla en la detección y aislamiento de los infectados y sus contactos. Además, se mantuvo una muy alta movilidad en la capital chilena.