Tras reapertura, aumentan casos de coronavirus en Florida
MIAMI (AP) — En su lucha contra un aumento de casos de coronavirus durante la primavera, Florida parecía “aplanar la curva” mientras cerraban parques temáticos y playas de arena blanca, y los residentes acataban las órdenes de quedarse en casa. Ahora, es como si eso nunca hubiera sucedido.
Los bares, restaurantes y gimnasios comenzaron a reabrir en mayo — los detractores de la medida dicen que fue demasiado pronto — y, semanas después, el estado playero se convirtió en uno de los focos del virus en el país, con un alarmante aumento de casos. El jueves, funcionarios reportaron 120 muertes en un día, la mayor cantidad desde su récord previo de 113 a principios de mayo.
“Pensamos que podíamos mantener esto bajo control. Y eso funcionó durante un corto tiempo”, dijo el miércoles el doctor Jason Wilson, un médico de emergencias en el Hospital General Tampa, durante una conversación con la alcaldesa de Tampa Jane Castor que fue transmitida en vivo en Facebook. “Pero con el tiempo… nos alcanzó”.
Desde Miami hasta Jacksonville y Tampa, los hospitales en junio y julio han visto cómo se triplican los casos de coronavirus, y los nuevos enfermos superan a los que reciben el alta. Se reportó el viernes que una cifra récord de 435 nuevos enfermos hospitalizados dieron positivo al virus, aunque la cifra incluye personas que buscan atención médica por otros motivos y no todos presentan síntomas.
Más de 45% de las unidades de cuidados intensivos en los hospitales de Florida estaban en su máxima capacidad o tenían menos de 10% de camas disponibles para el viernes, reportó en su sitio web la Agencia para Administración de Atención Médica del estado.
Los hospitales batallan para contratar a más trabajadores de salud para ampliar sus unidades de COVID-19. La semana pasada, hospitales en varias ciudades anunciaron que otra vez detendrían o reducirían los procedimientos que no fueran de emergencia para liberar espacio.
Wilson y otros expertos de salud consideran que el aumento fue provocado en gran medida por jóvenes asintomáticos que no suelen tomar precauciones al reunirse en los bares que reabrireron y las playas saturadas.
“Vimos que las compuertas realmente reabrieron para los jóvenes que tienen lo que llamamos propagación asintomática o presintomática”, acotó.