Nuevo primer ministro en Francia coordinó la reapertura
PARÍS (AP) — El presidente de Francia, Emmanuel Macron, nombró el viernes como nuevo primer ministro a Jean Castex, quien coordinó la estrategia de reapertura tras la cuarentena por el coronavirus, en momentos en que el país se enfoca en revivir una economía fuertemente afectada por la pandemia y meses de un confinamiento estricto.
Castex, que tiene un perfil relativamente bajo, sustituye a Edouard Philippe, quien presentó su renuncia momentos antes mientras Macron se reorganiza para cambiar el enfoque de su gobierno durante los dos años que restan de su mandato.
Macron, quien dice que quiere un “nuevo camino” para los dos años restantes de su mandato, ha elegido una nueva cara para abordar los problemas sociales y económicos en medio de los esfuerzos para la recuperación del país.
Castex, de 55 años, es un funcionario de carrera que ha trabajado con varios gobiernos pero nunca como ministro. En general, el plan de reapertura gradual del país ha sido considerado un éxito hasta la fecha.
El funcionario, que es conservador, comenzó una carrera política local en 2008 en la pequeña ciudad de Prades, en el sur de Francia, donde fue reelegido como alcalde en marzo con el respaldo del partido republicano.
Su trabajo destacó como subsecretario general en el Palacio del Elíseo, cuando fue presidente Nicolas Sarkozy en 2011-2012.
Castex también es considerado un experto en asuntos sociales y políticas de salud, dos temas que estarán en la cima de la agenda política en los próximos meses.
Se espera que muchos de los miembros del gobierno sean reemplazados en la esperada reorganización ministerial.
Macron, un centrista de 42 años, busca un equilibrio entre ministros provenientes de la derecha y de la izquierda, así como aliados centristas y personas del sector privado.
La reorganización se producirá días después de una oleada verde en las elecciones locales. Macron vio como su joven partido centrista era derrotado en las mayores ciudades del país, incapaz de echar raíces a nivel local en el país.
Los cambios gubernamentales estaban previstos antes incluso de los comicios, ya que el gobierno de Macron enfrentó obstáculos y críticas antes de la cita electoral del domingo y durante la crisis del coronavirus.
Durante el apogeo de la pandemia en el país en marzo y abril, las autoridades fueron objeto de críticas por la falta de mascarillas, pruebas de detección y equipos médicos.
Antes de eso, las políticas proempresariales de Macron, consideradas ampliamente como beneficiosas para los más ricos, se habían visto obstaculizadas por el movimiento de los chalecos amarillos contra la injusticia social percibida. Este invierno, el país se vio paralizado por semanas de huelgas y movilizaciones en las calles contra la propuesta de revisar el sistema de pensiones.
Adicionalmente, los esfuerzos de Macron para impulsar la creación de empleos se han topado con el impacto económico y social del cierre de actividades en el país por la crisis de salud.