Militares colombianos aceptan acusación de abuso a menor
BOGOTÁ (AP) — Siete militares colombianos aceptaron el jueves una acusación de la Fiscalía General por el abuso sexual de una menor de edad de la comunidad indígena emberá en el centro-oeste del país, hecho que el presidente Iván Duque calificó de acto “ruin”.
El ejército señaló en un comunicado emitido la víspera que el pasado lunes se tuvo conocimiento de la situación: un grupo de soldados pertenecientes al Batallón San Mateo, en la ciudad de Armenia, “estarían inmersos en un posible caso de abuso sexual al parecer con menor de edad perteneciente al Resguardo Indígena Envera Chami".
Lo sucedido habría tenido lugar en una zona de la población de Pueblo Rico, departamento de Risaralda.
La menor fue llevada a un puesto de salud para su respectiva valoración medica, “donde se realizó la restitución de sus derechos y fue entregada a la Unidad de Infancia Adolescencia de esa zona”, señala la nota.
Los siete militares aceptaron haber abusado de la chica y fueron enviados a una guarnición militar por un juez para que los escuchara el jueves.
Por la noche, el ministro de la Defensa, Carlos Holmes Trujillo, señaló en rueda de prensa en Bogotá que “desde que conocimos las primeras informaciones tomamos acciones, prestamos toda la colaboración a las autoridades competentes y retiramos del Ejército a estos criminales que hoy aceptaron cargos ante la Fiscalía. Se trata de un crimen execrable que condenamos de manera categórica”.
Horas antes, desde la ciudad de Cali, al occidente, el fiscal general Francisco Barbosa enfatizó en una declaración a medios que los militares acusados enfrentarán varios cargos por lo ocurrido, que generó indignación entre los colombianos.
“En menos de 72 horas, en un enlace con las diferentes autoridades y en una acción liderada por la delegada para la Seguridad Ciudadana y la Seccional Risaralda, se produce un resultado contundente en un hecho doloroso para los colombianos”, dijo Barbosa.
“Ellos mancharon su uniforme y la dignidad de la niñez de Colombia. Por eso se les solicitó medida de aseguramiento privativa de la libertad en centro carcelario. Entre los cargos imputados está el del delito de acceso carnal abusivo con menor agravado. Seis de ellos en calidad de autor y uno en calidad de cómplice”, agregó.
Barbosa precisó que la pena que deberán cumplir oscilará de 16 a 30 años de prisión.
En la noche, el comandante del ejército, general Eduardo Zapateiro, indicó que los siete soldados estaban prestando el servicio militar obligatorio de 12 meses y les faltaba un semestre para cumplirlo.
“Hoy estuve en Pueblo Rico, población donde pertenece la comunidad indígena de la menor afectada. Fui a dar la cara para decirles a mis hermanos mayores emberas que los apoyaremos, que siento el mismo dolor, la misma indignación que ellos y que se haga justicia, que fue lo que escuché con sentimiento diciéndomelo cara a cara”, agregó.
Duque dijo que lo sucedido es “ruin” y enfatizó que “no vamos a tolerar ningún tipo de abuso a menores de edad y mucho menos cuando están involucrados uniformados, que enlodan el honor de las fuerzas militares con actos ruines como el denunciado en Pereira contra una niña indígena”.
Luis Fernando Arias, de la Organización Nacional Indígena Colombiana, dijo a The Associated Press que las autoridades militares deberían entregar a la comunidad indígena a estos siete militares.
“Una vez paguen su condena bajo nuestra propia legislación, sean juzgados por la justicia ordinaria”, señaló.