MADRID (AP) — Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada.
En una prueba de su industria turística, España permitió que varios miles de alemanes se saltasen la cuarentena de 14 días tras volar a las Islas Baleares para disfrutar de unas vacaciones.
Pero la apertura no estuvo exenta de incidentes. La confusión sobre la hora exacta a la que Grecia podía recibir visitantes desde Bulgaria resultó en un atasco kilométrico que se prolongó durante horas el lunes en el principal paso entre las dos naciones.
A pesar de las nuevas medidas, muchas de las restricciones impuestas a los viajes siguen vigentes. Noruega y Dinamarca no dejan entrar a sus vecinos suecos porque consideran que la tasa de infección en el país sigue siendo demasiado alta. El continente aún no está abierto a turistas de Estados Unidos, Asia y otros destinos internacionales.
Los parisinos, por su parte, disfrutaron de la vuelta a sus bistrós favoritos luego de que el presidente del país, Emmanuel Macron, anunció por sorpresa que podían regresar a los restaurantes días antes de lo esperado.
Macron dijo a la población que debía “redescubrir el arte de vivir” y su “gusto por la libertad”. Muchos parisinos hallaron eso en salidas para tomarse un espresso rápido en la mañana o almuerzos de tres platos.
Marie-Elisabeth Vilaine, calificó su regreso al Café Des Anges, en el corazón del vecindario de Bastilla de la capital francesa, como "un renacimiento pero con precaución”.
En Inglaterra, los compradores formaron largas filas para adquirir artículos como zapatillas de deporte y juguetes coincidiendo con la apertura de las tiendas no esenciales por primera vez desde el inicio de la cuarentena a finales de marzo.
Los compradores volvieron a disfrutar curioseando entre las perchas y las estanterías de las tiendas. La mayoría parecía respetar las normas de distanciamiento social, pero se registraron algunos incidentes aislados en la tienda de NikeTown en Oxford Street, la meca de las compras en Londres.
Clientes celebran poder entrar a los grandes almacenes Selfridges, en Londres, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/Matt Dunham)
Una mujer, en una terraza cerca de la playa en Palma de Mallorca, España, el 15 de junio de 2020. Las fronteras en Europa se reabrieron el 15 de junio tras tres meses cerradas por la pandemia del coronavirus. (AP Foto/Joan Mateu)
Un camarero (centro), limpia una mesa en un restaurante, con la catedral de Notre Dame de fondo, el 15 de junio de 2020 en París. (AP Foto/Thibault Camus)
Empleados de Nike hablan con la gente que hace fila en el exterior de la tienda Niketown para tratar de que respeten las normas de distanciamiento social, en Londres, el 15 de junio de 2020. (AP Foto/Matt Dunham)
Un turista alemán toma el sol en la piscina del hotel Riu Concordia, en Palma de Mallorca, España, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/Joan Mateu)
Clientes se toman un selgie mientras disfrutan de un almuerzo en un restaurante, en París, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/François Mori)
Un hombre come en la terraza de un restaurante en París, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/François Mori)
un visitante, con mascarilla para evitar la propagación del coronavirus, observa una estatua de bronce de Zeus, o Poseidón, realizada a mediados del siglo V a.C. durante la reapertura del Museo Arqueológico, en Atenas, el 15 de junio de 2020. (AP Foto/Thanassis Stavrakis)
Personal médico realiza la prueba de detección del nuevo coronavirus a pasajeros de un vuelo procedente de Doha, Qatar, en el aeropuerto internacional Eleftherios Venizelos, en Atenas, el 15 de junio de 2020. (AP Foto/Thanassis Stavrakis)
Turistas alemanes llegan a la playa de Palma de Mallorca, España, el 15 de junio de 2020. Las fronteras se abrieron en toda Europa el 15 de junio, tres meses después de los cierres provocados por la pandemia del coronavirus. (AP Foto/Joan Mateu)
Una persona camina entre la gente con bolsas de los grandes almacenes Selfridges, en Londres, el 15 de junio de 2020. Tras tres meses cerrados por la pandemia del coronavirus, las tiendas de ropa, juguetes y otros productos no esenciales reabren sus puertas en Inglaterra, por primera vez desde el inicio de la cuarentena en marzo. (AP Foto/Matt Dunham)
Bañistas disfrutan de la playa en Palma de Mallorca, España, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/Joan Mateu)
Una pasajera, con mascarilla para protegerse del coronavirus, espera en un banco antes de embarcar en un vuelo, en el aeropuerto internacional Zaventem, luego del alivio de parte de las restricciones por el COVID-19, en Bruselas, el 15 de junio de 2020. (AP Foto/Francisco Seco)
Un visitante, con mascarilla para evitar la propagación del coronavirus, observa una estatua de bronce de un jinete a caballo, del 140 a.C., durante la reapertura del Museo Arqueológico en Atenas, el 15 de junio de 2020. (AP Foto/Thanassis Stavrakis)
Un camarero manipula una pieza de pan en el restaurante La Coupole, el 15 de junio de 2020, en París. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/Christophe Ena)
Pasajeros, con mascarilla para protegerse del coronavirus, esperan en fila para hacer el check-in en el aeropuerto internacional de Zaventem tras el alivio parcial de las restricciones de vuelo por el COVID-19, en Bruselas, el 15 de junio de 2020. (AP Foto/Francisco Seco)
Una fila de gente espera para entrar a la tienda Niketown, en Londres, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/Matt Dunham)
Una empleada coloca un cartel de bienvenida en el escaparate de una tienda de H&M en Canterbury, Inglaterra, el 15 de junio de 2020. Tras tres meses cerrados por la pandemia del coronavirus, las tiendas de ropa, juguetes y otros productos no esenciales reabren sus puertas en Inglaterra, por primera vez desde el inicio de la cuarentena en marzo. (Gareth Fuller vía AP)
Un pasajero de un vuelo de TUI de Düsseldorf a Mallorca habla con reporteros a su llegada al aeropuerto Son Sant Joan, en Palma de Mallorca, España, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/Joan Mateu)
Un hombre limpia pegatinas que señalan la distancia de seguridad en la acera antes de la apertura de los grandes almacenes Selfridges, en Londres, el 15 de junio de 2020. Ya sean turistas alemanes disfrutando del sol en España o parisinos que renuevan su historia de amor con su ciudad, la apertura de fronteras entre varias naciones europeas el lunes y la eliminación de más restricciones ofrecen a los europeos un atisbo de la vida precoronavirus, una vida que nunca más volverán a dar por sentada. (AP Foto/Matt Dunham)