Trump destaca diversidad de graduados de West Point
WEST POINT. Nueva York, EE.UU. (AP) — El presidente Donald Trump destacó el sábado la diversidad de los cadetes graduados de West Point y exhortó a los flamantes oficiales a sostener los valores medulares de la nación, en un discurso en el que puso de relieve la unidad en momentos de tensión en la relación entre el comandante en jefe y los militares y cuestionamientos sobre la función de los militares en la sociedad civil.
“Ustedes han llegado de los campos y las ciudades, de estados grandes y pequeños y de todas las razas, religiones, colores y credos. Pero al entrar a estos terrenos se convirtieron en parte de un equipo, una familia que sirve con orgullo a una nación americana”, dijo Trump a los más de 1.100 graduados.
El presidente pronunció su discurso de graduación en momentos que proliferan las discusiones en torno a su amenaza de usar a las tropas en tierra estadounidense para reprimir las protestas provocadas por la muerte de George Floyd a manos de un agente de policía de Minneapolis.
Trump destacó la “misión común” de “proteger nuestro país, defender nuestro pueblo y llevar adelante las tradiciones de libertad, igualdad y libertad por las que tantos dieron la vida”.
Las tensiones entre la Casa Blanca y los militares han escalado desde que comenzaron las protestas nacionales en torno a la muerte de Floyd, un hombre negro al que un agente blanco le apretó el cuello durante varios minutos a pesar de sus súplicas de que no podía respirar.
En aparente alusión a las protestas, Trump dijo que la “singularidad” de Estados Unidos deriva de la “durabilidad de sus instituciones contra las pasiones y prejuicios del momento. Cuando los tiempos son turbulentos, cuando el camino es arduo, lo que más importa es lo permanente, intemporal, perdurable y eterno”.
Dijo que de la Academia Militar de Estados Unidos salieron “los hombres y mujeres que libraron y ganaron una guerra sangrienta para extinguir el mal de la esclavitud dentro de un tiempo de vida de nuestra fundación”.
El superintendente de West Point, teniente general Dayrryl A. Williams, el primer afroestadounidense nombrado a ese puesto, dijo a los cadetes que los “retos por delante requerirán valor moral y físico”.
En las últimas dos semanas, Trump regañó al secretario de Defensa, Mark Esper, por oponerse públicamente al llamado del presidente a usar soldados en servicio activo para reprimir manifestaciones. Luego bloqueó un intento de Esper de abrir un debate público sobre eliminar los nombres de los oficiales del Ejército Confederado de las bases militares. Ese ejército representó a los estados sureños que se separaron durante la Guerra Civil estadounidense y que, entre otras cosas, defendieron la esclavitud.
El general Mark Milley, presidente del Estado Mayor Conjunto, enfureció aún más a Trump el jueves, al declarar que fue “un error” suyo haber acompañado a Trump en una caminata el 1 de junio por el parque Lafayette, para que el presidente posara para los medios de comunicación sosteniendo una Biblia fuera de la Iglesia de San Juan, que fue dañada por el fuego durante los disturbios.
Las declaraciones de Milley fueron a una expresión extraordinaria de arrepentimiento por parte del principal asesor militar de Trump. Milley dijo que su presencia en la caminata condujo a la percepción de que los militares se estaban inmiscuyendo en política, lo que en su opinión, al igual que la de Esper, es una amenaza para la democracia.