Con un momento de silencio regresa la PGA
FORT WORTH, Texas, EE.UU. (AP) — El comienzo fue más silencioso de lo normal para un jueves en la mañana en la Gira de la PGA. De hecho la quietud persistió en las siguientes 12 horas que marcaron el regreso del golf, en el Charles Schwab Challenge.
Sung Kang logró un hoyo en uno en el 13 pero no se percató sino hasta que se encontraba a 50 yardas del green.
“Dije, ‘increíble, es un hoyo en uno’. No fue algo loco. No había nadie allá, sólo unas cuentas personas aplaudiendo un poco", dijo Kang. “Aún así lo aprecié”.
Phil Mickelson tuvo un birdie e instintivamente tomó el borde de su gorra en reconocimiento de la afición que no estaba ahí.
Silencioso como estaba, el club Colonial se paralizó a las 8:46 de la mañana, cuando todos los que estaban en el campo guardaron un momento de silencio por la muerte de George Floyd y la indignación que ésta causó a nivel mundial ante las injusticias raciales.
Fue una de las rondas de golf más inusitadas.
Pero fue golf al fin.
Justin Rose y Harold Varner terminaron compartiendo la cima tras la primera ronda con 63 golpes, 7 bajo par.
Justin Thomas se ubicó un golpe detrás, junto con el venezolano Jhonattan Vegas y el mexicano Abraham Ancer, que tuvieron un estupendo comienzo.
También en 64 golpes, seis debajo del par, se ubicó Collin Morikawa. Tom Lehman, excampeón en Colonial de 61 años, quedó cerca con 65 golpes.
Vegas asistió a la cercana Universidad de Houston. En condiciones normales habría tenido bastante apoyo del público local.
“Aunque no tenemos público, sentir el apoyo de la gente y saber que tenemos el torneo aquí se siente realmente bien”, comentó el venezolano. “Tengo muchos amigos que me han enviado mensajes de texto y me han brindado mucho su apoyo mientras me preparaba para jugar. Ellos estaban muy emocionados de saber que volveríamos a competir. Se siente como estar en casa”.
Las condiciones fueron ideales para las buenas tarjetas pero sin las ovaciones.
“Definitivamente fue mucho más silencioso y creo que se jugó más rápido porque no tenías por qué preocuparte o ver si alguien se movía. Extraño mucho tener a la gente aquí”, explicó Ancer. “Siempre es increíble hacer un gran tiro y escuchar la emoción de la gente. Ese ambiente es genial. Como he dicho, el PGA Tour ha hecho un gran trabajo para volver a la competencia, así que lo respeto. Es maravilloso estar de regreso”.
“Se siente como una ronda de práctica competitiva”, coincidió Rose, quien ganó en Colonial hace dos años. “Pero obviamente todos sabemos lo que está en juego. Obviamente extrañamos a los aficionados. Definitivamente proveen energía y gran atmósfera”.
El golf es el segundo de los grandes deportes de Estados Unidos, detrás del automovilismo, que regresa tras la suspensión por la pandemia de COVID-19. Entre las medidas de seguridad que se aplicaron figuraron pruebas de coronavirus para cada jugador, caddie y empleado esencial.
De las 487 pruebas aplicadas en el Colonial, todas arrojaron resultados negativos.
La transmisión comenzó con una disculpa. Justo cuando Golf Channel entró al aire, alguien pronunció una mala palabra, que resonó en el silencio, después de un golpe del español Jon Rahm.
“Bueno, esperamos ahora un mejor audio, sin público”, dijo el conductor de la CBS, Jim Nantz.
El comisionado de la PGA Jay Monahan le dio al primer grupo el visto bueno después de pegarle a la primera bola. Regresó a la salida, solo, a las 8:46 dela mañana.
Esa hora de salida fue puesta en la lista pero sin jugadores. La Gira dejará esa hora vacía en las cuatro rondas para un momento de silencio. Se trata de un homenaje a Floyd, de raza negra, quien murió después de que un policía blanco le presionó el cuello contra el piso con una rodilla.
Esposado, Floyd suplicó que se le permitiera respirar. El agente siguió arrodillado encima de él durante 8 minutos y 46 segundos.
Varner es uno de los cuatro jugadores de herencia negra que tienen membresía completa de la PGA y publicó un claro mensaje la semana pasada en redes sociales. También se sentó con Monahan en un video de 10 minutos, para plantear qué puede hacer el golf ante el racismo.
A la pregunta de qué se requeriría para declarar que este torneo fue exitoso, Monahan dijo el jueves: “Llegar a la siguiente semana”.