Fútbol mexicano vuelve el 24 de julio, 12 clubes en liguilla
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Después de una inactividad de más de cuatro meses por la pandemia de coronavirus, el fútbol mexicano regresará a las canchas a fines de julio.
El presidente de la Liga MX, Enrique Bonilla, anunció el miércoles que el próximo torneo Apertura arrancará el 24 de julio y terminará el 12 de diciembre. La final sólo cambiaría de fecha en caso de que un equipo mexicano se clasifica al Mundial de Clubes y alcance la final. Eso es algo incierto porque la Liga de Campeones de la CONCACAF detuvo su actividad por la pandemia cuando estaban por disputarse las semifinales y aún no hay una fecha para su reanudación, aunque Bonilla dijo que sí se van a realizar.
Además, Bonilla confirmó que la suspendida final por la Copa MX entre Tijuana y Monterrey se jugará con partidos de ida y vuelta el 16 y 23 de septiembre.
“Ante este periodo tan complicado que hemos enfrentado, veo señales de recuperación en el fútbol nacional”, dijo el presidente Bonilla, quien en marzo dio positivo por COVID-19. ”Ya tenemos fecha de inicio y propuesta de calendario, además como todos saben hemos distribuido el protocolo de salud que nos da claridad sobre las medidas a tomar para preservar la salud de todos”.
Además del regreso a las canchas, Bonilla informó que desde el Apertura 2020 se incluirá un repechaje que aumentará el número de equipos clasificados a la postemporada, de ocho a 12.
“Son momentos para preservar elementos que han mostrado su éxito y nuevas dinámicas deportivas y comerciales que resulten benéficas para el torneo”, agregó el dirigente sobre el nuevo formato. “Lo que buscamos es que todos los partidos de todo el torneo sean de interés y que todos tengan algo por qué pelear, sobre todo en esa parte media de la tabla, que sepa que con esto te abra la posibilidad de participar en la parte final y que te aleje de los últimos lugares, donde hay una penalidad que es importante”.
Aunque el país atraviesa el momento más crítico por la pandemia, con números récord de contagios y muertes, las autoridades sanitarias autorizaron desde la semana pasada el regreso de los deportes profesionales, pero sin público, como una medida para mitigar la transmisión del virus.
Hasta el martes por la noche, México reportaba 124.301 contagios y al menos 14.696 muertos, aunque las autoridades han dicho que las cifras serían más altas.
Con miras a un eventual regreso a los entrenamientos presenciales, todos los equipos de la primera división han estado realizando pruebas para detectar el coronavirus desde la semana pasada.
Hasta ahora, 33 integrantes de la máxima categoría han salido positivos asintomáticos. El portero Jonathan Orozco y el entrenador uruguayo Guillermo Almada (Santos), así como el delantero argentino Rogelio Funes Mori (Monterrey), han sido los únicos que han hecho público sus casos.
La Liga MX dio a conocer en la víspera un protocolo para el regreso que incluye cuatro puntos antes del regreso a los partidos. Primero es la realización de pruebas, luego el regreso a entrenamientos presenciales en grupos de seis jugadores, después el regreso a entrenamientos con plantel completo y finalmente los partidos con restricciones en los saludos, festejos y ceremonias previas.
De acuerdo con el organismo, el protocolo fue aprobado por las autoridades sanitarias a nivel federal.
La emergencia sanitaria provocó la suspensión del torneo Clausura el 15 de marzo, cuando ya se habían disputado 10 de las 17 fechas del calendario regular. Fue la primera vez en la era profesional, que inició en la temporada 1943-44, que un torneo se cancela y termina con el título desierto.
“Fue una medida que fue la mejor, pero no por ello menos triste”, dijo Bonilla. “Todos los eventos que se han juntado de marzo para acá ha servido para cerrar filas, para que se limen asperezas y para que haya una unión que en algún momento se estaba perdiendo, pero que se ha retomado y ha retomado con fuerza y hoy hay una asamblea (de dueños) sólida y fuerte, trabajando para lograr lo mejor para nuestra industria”.
Bajo el nuevo formato de competencia, sólo los cuatro primeros equipos avanzan directamente y los otros ocho se enfrentan entre sí para dirimir quiénes siguen con vida en partidos a un solo enfrentamiento en casa del equipo con más puntos.
El dirigente dijo que ese formato no es sólo para el próximo torneo, sino es algo que se mantendrá por varios más y sólo se regresará al anterior si no resulta un éxito.
Sobre una fecha para el regreso de aficionados en los estadios, dijo que eso dependerá de la autorización de las autoridades federales y que todo dependerá de qué tan rápido el país salga de la crisis sanitaria.
Hasta ahora, las actividades productivas en el país están siendo controladas con un semáforo de cuatro colores. El país actualmente se encuentra en el color rojo que permite sólo actividades esenciales, además de la minería, la industria de la construcción y la automotriz. Apenas la semana pasada las autoridades sanitarias incluyeron a los deportes profesionales dentro del color rojo, pero con la condicionante de que se realicen sin gente en las tribunas.
De acuerdo con ese ese semáforo, el público volverá en números reducidos cuando el color sea amarillo.
OTROS ACUERDOS
-Se implementará un nuevo esquema de sanciones para los equipos en la parte baja de la tabla de promedios que antes definía el descenso. El que termine último pagará 120 millones de pesos (unos 5,45 millones de dólares), el penúltimo 70 millones (unos 3,18) y el antepenúltimo 50 (2,27). Hasta el torneo anterior si un equipo descendía podía pagar 6 millones de dólares para permanecer en primera, pero recientemente la Liga MX abolió los ascensos y descensos.
-Se hizo oficial el cambio de nombre y sede del Morelia, que se muda a Mazatlán, en el Pacífico mexicano. Además, el Grupo Caliente vendió al Querétaro a un grupo de empresarios que poseen al Atlante de la segunda división y sólo se quedará con Tijuana. No se informó de un probable cambio de sede, como se ha conjeturado en las últimas semanas.
-A partir de ahora todos los contratos de los jugadores dejarán de realizarse en dólares y se harán en pesos. También quedan prohibidos los dobles contratos para realizar la misma actividad, una práctica que algunos clubes hacían para evadir impuestos porque ante el fisco registraban una cantidad menor y hacían un acuerdo adicional para cubrir el resto.