Quito retoma actividad tras largo confinamiento por COVID-19
QUITO (AP) — Por primera vez en casi 80 días, Quito amaneció el miércoles con servicio de transporte público y gente con mascarillas en las calles que se dirigía a sus trabajos, aunque aún se mantienen ciertas restricciones a la movilidad y las labores.
Los quiteños iniciaron un riguroso confinamiento el 16 de marzo, que incluyó un toque de queda de 17 horas diarias y salidas una vez por semana para abastecerse, mientras el 70% del aparato productivo de Ecuador se mantenía paralizado.
A pesar de que hacia fines de mayo los hospitales de la capital estuvieron al borde de llegar a su máxima capacidad, el alcalde de Quito, Jorge Yunda, decidió flexibilizar las restricciones, aunque convocó a los ciudadanos a mantener el distanciamiento social y pidió que “toda actividad que se pueda hacer desde casa tiene que seguir manteniéndose".
Se declaró la cuarentena luego de las escenas registradas en la ciudad portuaria de Guayaquil, cuyo sistema hospitalario se vio superado por la cantidad de enfermos de coronavirus, lo que derivó en que decenas de cadáveres fueran abandonados en las calles o en sus residencias.
Desde el miércoles las empresas capitalinas pueden funcionar al 50% de su capacidad, los autobuses pueden llevar la mitad de los pasajeros y los restaurantes pueden atender al 30% de los clientes. Las despensas y los comercios están autorizados a laborar con distanciamiento social y con fuertes precauciones sanitarias, lo que los ha llevado a instalar barreras como plásticos y vidrios para separar al público de los vendedores.
Sin embargo, se mantiene el toque de queda entre las 9 de la noche y las 5 de la mañana; las escuelas, bares, discotecas y gimnasios están cerrados, y las iglesias sólo pueden tener un mínimo de fieles al mismo tiempo y un plazo de 15 minutos de permanencia para orar.
Las concentraciones de personas y los espectáculos masivos siguen prohibidos, pero los parques públicos están abiertos.
Desde el primer caso detectado el 29 de febrero, Ecuador ha registrado 5.639 muertos por coronavirus y 40.414 contagiados.
En contrapartida, el alcalde de la ciudad colombiana de Medellín, Daniel Quintero, resolvió sancionar con 240 dólares a las personas que no usen tapabocas debido al incremento de casos.
Por su parte, el director del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario, general Norberto Mujica, informó a la AP que durante la cuarentena obligatoria -que finalizaría el 1 de julio- unos 14.080 reclusos condenados por delitos menores fueron beneficiados con el arresto domiciliario. La medida permitió que el hacinamiento en las cárceles -donde se registraron 1.302 casos y cuatro fallecidos- descendiera del 57% al 39%.
En Colombia se han reportado 33.354 contagiados y 1.045 fallecidos.
En tanto, en Bolivia los contagios siguen aumentando después de que se levantó la cuarentena en gran parte del país. El ministerio de Salud informó que tan sólo el miércoles se registraron 647 nuevos casos y 24 decesos, marcando un nuevo pico, con lo cual ya suman 11.238 casos y 400 fallecimientos.
En el tercer día de la reapertura de las actividades, siete aeropuertos iniciaron vuelos nacionales en medio de medidas estrictas después de que en los primeros días de la semana en un vuelo viajaron tres personas contagiadas con el coronavirus. El ministro de Obras Públicas, Iván Arias, explicó que los pasajeros ocultaron sus síntomas para poder abordar el avión.
En tanto, en la localidad cocalera del Chapare, en el centro del país, se anunció un aislamiento estricto debido a un alto incremento en los contagios.
En Santa Cruz, la región que concentra el 66% de los casos, los hospitales están al borde de la saturación. La Comisión Interamericana de Derechos Humanos llamó la atención por el fallecimiento de un hombre de 74 años a quien siete hospitales de esa ciudad no quisieron recibirlo.
En La Paz la alcaldía anunció una “celebración virtual” de la mayor fiesta patronal de la ciudad, la festividad del Señor Jesús del Gran Poder, que anualmente reúne a más 30.000 bailarines y músicos.
“Planeábamos celebrar la inclusión de la festividad como patrimonio cultural de la UNESCO”, dijo el secretario de Culturas, Andrés Zaratti.
En Argentina, donde se han registrado 18.319 infectados y 570 fallecidos, el ministro de Salud, Ginés González García, se reunirá con expertos para analizar los pasos a seguir y cómo se prolongará desde el 8 de junio la cuarentena que comenzó el 20 de marzo.
En la capital argentina, uno de los principales focos de la enfermedad en el país, las autoridades señalaron que el escenario es complejo pero consideraron necesaria cierta flexibilización. El ministro de Salud de la ciudad, Fernán Quirós, dijo que es muy probable que a partir de la próxima semana se permita a la gente salir a hacer ejercicio por la noche “cuando ya no hay circulación social” y la reapertura de negocios de indumentaria y calzado.
En México, durante su tercer día de gira por el sureste del país, el presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que la Ciudad de México y su natal Tabasco son las dos entidades que le preocupan ahora que el país transita en los primeros días de una reactivación económica y afirmó estar dispuesto a dar marcha atrás si se presentan nuevos brotes de coronavirus por la apertura.
El país registró el miércoles 1.092 nuevas muertes por COVID, más del doble de los decesos que se estaban contabilizando diariamente en la última semana. No obstante, el subsecretario Hugo López-Gatell, vocero del gobierno para la pandemia, subrayó que ese incremento no significa que se haya multiplicado la letalidad en las últimas horas, sino que se trata de fallecidos de los últimos 20 días que tuvieron un lento registro por “razones varias” que no detalló.
De este modo, los muertos hasta ahora por la pandemia ya ascienden, al menos, a 11.729, y los contagios totales confirmados superan los 101.000, cifras que las propias autoridades reconocen no representan el total de los casos pero que muestran cómo la transmisión del coronavirus sigue en claro ascenso.
Entre las cifras presentadas el miércoles por la noche, llamó la atención también el notable incremento en los casos sospechosos, es decir, pendientes del resultado de las pruebas de confirmación, que en sólo tres días pasaron de poco más de 25.700 a casi 45.000, es decir, más de 19.000.
Por su parte, Chile utilizará a los funcionarios de la salud municipal para detectar a los contagiados y a sus contactos estrechos, con el fin de frenar el aumento sostenido de infectados que mantienen al sistema hospitalario con el 97% de sus camas para pacientes críticos ocupadas, informó el ministro de Salud, Jaime Mañalich.
En el país hay 113.628 infectados, de los cuales 21.605 son “contagiantes” activos. El miércoles fallecieron 87 personas más, con lo que ya suman 1.275 desde que se detectó el coronavirus a Chile hace tres meses. La mayoría de los casos están en el gran Santiago, donde viven ocho de los 18 millones de chilenos.
Más tarde, el ministerio de Salud de El Salvador decretó que el territorio nacional es zona sujeta a control sanitario y prorrogó la cuarentena domiciliar obligatoria hasta el 15 de junio, medidas con las que el gobierno trata de contener el avance del coronavirus, justo cuando el país también se encuentra en emergencia por las lluvias que desde el fin de semana cubren gran parte de la nación.
La población sólo puede salir a comprar comida dos veces por semana, en función del último número de su Documento Único de Identidad (DUI). Las medicinas podrán adquirirse, aunque no corresponda por el DUI.
Los restaurantes podrán operar únicamente con servicio a domicilio y sólo pueden permanecer abiertos los bancos, las farmacias, los supermercados, las ventas de granos básicos, las gasolineras, las empresas de servicio de telefonía y las funerarias.
El Salvador registra 2.705 casos confirmados, 51 fallecidos y 1.186 recuperados.
Por otro lado, en Guatemala, el ministro de Salud, Hugo Monroy, anunció que los contagios ya suman 5.617, más 143 fallecidos.
El presidente Alejandro Giammattei juramentó a Edwin Asturias como director ejecutivo de la Comisión Presidencial contra el Coronavirus, quien detalló algunos pasos a seguir para reabrir la economía y normalizar las actividades después de que sea aplanada la curva de contagios de la enfermedad.
Asturias dijo que la normalización llegara en cuatro fases, con aproximadamente 14 días de por medio, a partir de que la curva de contagios mantenga una disminución permanente por un período de 14 días. El funcionario también explicó que actualmente dicha curva es “severa” en el país.
Por su parte, Venezuela reportó una cifra de 1.932 infectados y 20 decesos.
En América Latina se han registrado más de 1,1 millón de contagios y casi 56 mil muertos.
A nivel mundial, el coronavirus ha infectado a más de 6,3 millones de personas y causado la muerte a más de 383.000 en todo el mundo, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.