Varios han fallecido en los días de protestas en EEUU
Varias personas han fallecido en la última semana de protestas en varias ciudades estadounidenses, detonadas por el fallecimiento de George Floyd, de 46 años, quien murió asfixiado estando detenido por la policía.
Una de las víctimas era el propietario de un restaurante en Louisville que regalaba comida a los agentes. Otro era “Mr. Indianápolis”, un talentoso exjugador de fútbol. Otro más era un agentes que trabajaba durante una protesta.
Las muertes se han visto ensombrecidas por las impactantes imágenes del caos que envuelve ahora a las ciudades de todo el país, desde tácticas policiales antidisturbios hasta violencia, vandalismo e incendios provocados. Pero también miles han marchado pacíficamente contra la brutalidad policial y el racismo.
Muchas de las personas muertas eran negras, lo que agrava la tragedia, y decenas más han resultado heridos en varios altercados.
La cifra de fallecidos y las circunstancias todavía se están determinando en muchas ciudades.
Tal es el caso en Louisville, donde los agentes trataron de dispersar una multitud el lunes, escucharon disparos y respondieron a tiros, matando al dueño de un restaurante de barbacoa, David McAtee. Desde entonces, el alcalde despidió al jefe de policía de la ciudad después de descubrir que los agentes en la escena no activaron sus cámaras corporales. Las autoridades ya están investigando.
McAtee, de 53 años, era un hombre afroamericano conocido por regalar la comida a los agentes que concurrían a su local.
Las protestas en Louisville se agudizaron con la muerte de Floyd, pero desde días antes la gente comenzó a movilizarse por el fallecimiento de Breonna Taylor, una mujer negra asesinada de ocho tiros en marzo cuando agentes antinarcóticos llegaron a su casa con una orden de registro. No se hallaron drogas en la vivienda.
En Oakland murió el agente federal Dave Patrick Underwood, de 53 años, cuando alguien disparó desde un vehículo mientras él trabajaba custodiando un tribunal durante una protesta.
En Indianápolis falleció durante las protestas del fin de semana Chris Beaty, de 38 años, exjugador de la Universidad de Indiana.
En Minneapolis murió Calvin L. Horton Jr. de 43 años afuera de una casa de empeño; en Omaha, Nebraska, falleció James Scurlock de 22 años tras un altercado con el dueño de dos bares. Las últimas cuatro víctimas también eran de raza negra.