Turno de Portugal en la vuelta del fútbol en Europa
La liga portuguesa retoma su actividad esta semana, otro paso en el retorno gradual del fútbol europeo en medio de la pandemia de coronavirus.
Después de que el balón volviera a rodar en la Bundesliga de Alemania y en otras ligas de menor calado de Europa, ahora es el turno de Portugal. El campeonato luso se reanuda el miércoles con la visita del Porto al Famalicao, en un partido que suscitó la preocupación de las autoridades locales después de que aficionados dijeron que querían juntarse afuera del estadio.
Las autoridades se alarmaron cuando hinchas del Porto indicaron que planificaban viajar a Vila Nova de Famalicao para alentar a su equipo, a pesar de que no se admitirá el ingreso de aficionados al estadio.
“No debería haber aficionados afuera del estadio”, advirtió la directora general de Salud de Portugual Graça Freitas el lunes. “No queremos que la gente se reúna en cafés o lugares en los que mostrarán el juego por televisión. El virus sigue afuera, no ha desaparecido”.
“Se deberán seguir las reglas”, dijo. “El reinicio de la liga es un paso importante y se necesitó de un gran esfuerzo. Ahora tenemos que asegurarnos que la temporada termine de manera segura y de que nadie se infecte debido al fútbol. Debe prevalecer la responsabilidad social, no vamos a arriesgarlo todo lo que hemos alcanzado hasta ahora”.
El grupo de aficionados del Porto calcula que alrededor de 300 personas harían el viaje, pero que cumplirán con las medidas sanitarias que establecieron las autoridades. De acuerdo con las restricciones locales no están permitidas las reuniones de más de 20 personas y hay un límite en el uso del transporte público.
El regreso del fútbol ya había generado polémica en el país, después de que el gobierno indicó que la liga, equipos y jugadores debían asumir la responsabilidad de las consecuencias de jugar. Indicó que debían “asumir el riesgo de infección” y “asumir la responsabilidad” de todas las consecuencias relacionadas con la enfermedad y “el riesgo de salud pública”.
Las autoridades llegaron a pedirle a los involucrados firmar un documento aceptando esos parámetros, una solicitud que provocó una serie de quejas por parte de los jugadores.
El sindicato de jugadores eventualmente alcanzó un acuerdo con el gobierno, en el que señaló que sólo se quería asegurar que los los futbolistas y los demás involucrados cumplirán con las medidas sanitarias que se impusieron para permitir jugar.
Originalmente, la liga portuguesa debió reanudarse a fines de mayo pero pospusieron su reinicio una semana para llevar a cabo una inspección más rigurosa de los estadios y realizar pruebas a todos los involucrados en los partidos.
Todos los jugadores fueron sometidos a pruebas esta semana antes de que les autorizaran jugar. Los partidos se disputarán con estadios vacíos hasta el final de la temporada.
El campeón reinante Benfica, que marcha detrás del Porto por un punto de diferencia con 10 jornadas por disputar, recibirá al Tondela en el Estadio de la Luz el jueves.