EEUU: Comisión que monitorea apoyo económico está sin líder
WASHINGTON (AP) — Siete semanas después de que el Congreso liberara más de 2 billones de dólares para lidiar con la crisis del coronavirus, una comisión de supervisión creada para monitorear cómo se gasta el dinero sigue sin un líder.
Cuatro de los cinco miembros de la Comisión Legislativa de Supervisión han sido designados, pero la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, y el líder de la mayoría en el Senado, el republicano Mitch McConnell, no han llegado a un acuerdo sobre quién la presidirá, lo que ha dejado a la comisión sin timonel en un momento en que el gobierno federal inyecta sumas sin precedentes a la economía.
Sin un líder, los miembros restantes del panel todavía pueden hacer parte del trabajo de supervisión, pero no pueden contratar personal ni montar una oficina. Los cuatro miembros no se han reunido desde que el Congreso aprobó la ley de rescate económico y el presidente Donald Trump la promulgó a finales de marzo.
“Si la comisión no está funcionando —y no lo está— entonces no se supervisa” una gran parte de la ley de rescate económico, dijo John Coates, profesor de leyes y economía en la Escuela de Derecho de la Universidad de Harvard.
El Congreso formó el panel para que supervise más de 500.000 millones de dólares en préstamos a industrias en apuros con respaldo del Departamento del Tesoro y la Reserva Federal. La Fed ha dicho que el dinero puede ser aprovechado para ofrecer más de 2 billones de dólares en préstamos a compañías estadounidenses.
Pero sin un presidente, la actividad del panel se ha reducido a tuits y a cartas de comisionados individuales, y un comunicado del 8 de mayo en el que se prometía publicar un informe requerido “pronto”.
El fracaso de Pelosi y McConnell en llegar a un acuerdo sobre quién la dirigirá es el más reciente ejemplo de un Congreso disfuncional, marcado por el partidismo y la polarización. Incluso cuando ambas partes reconocen la importancia de supervisar la amplia ley de rescate económico, los legisladores están paralizados por una lucha política más grande, sin una resolución inmediata a la vista.