Colombia refuerza medidas de salud en frontera con Brasil

BOGOTÁ (AP) — Colombia redobló el jueves sus esfuerzos para frenar las infecciones de coronavirus cerca de su frontera con Brasil a medida que los hospitales se saturan y el número de casos se eleva en una región vulnerable de la Amazonía que alberga a muchos grupos indígenas.

El presidente Iván Duque anunció que se ordenó que todos los residentes del departamento de Amazonas permanezcan confinados salvo para ir en busca de alimentos o de atención médica. El ejército también desplegó tropas para fortalecer la seguridad fronteriza.

"Una vez mas nos encontramos con una situación que puede tornarse crítica dadas las diferencias que tenemos en el enfoque desde punto de vista epidemiológico con vecinos, como es el caso de Brasil”, declaró Duque.

Colombia ha tomado algunas de las medidas más estrictas de la región en el combate al virus, implementando una cuarentena nacional que sigue vigente en gran parte del país. Es un marcado contraste con Brasil, donde el presidente Jair Bolsonaro ha criticado los intentos de los gobernadores y alcaldes de cerrar los comercios no esenciales.

La ciudad colombiana de Leticia y el enorme departamento de Amazonas han registrado un incremento de casos en días recientes, al pasar de 105 a 924 desde que inició el mes. Los doctores señalan que los hospitales de la región están mal equipados y hacinados, y las autoridades locales comentan que tal vez necesiten abrir un nuevo cementerio para lidiar con el número de cadáveres.

Hasta el momento se han registrado 30 decesos en ese departamento.

Varios pueblos indígenas viven cerca de Leticia, quedando particularmente vulnerables al virus. Un total de 146 indígenas han sido diagnosticados con COVID-19 y seis de ellos han muerto, según la Organización Nacional Indígena de Colombia.

Entre los fallecidos se incluye al actor indígena que protagonizó la aclamada cinta colombiana “El abrazo de la serpiente”. Antonio Bolívar enfermó con síntomas de COVID-19 a finales de abril y murió a principios de mayo.

Su hijo declaró al diario El Tiempo que Bolívar utilizó inicialmente tratamientos tradicionales indígenas, como cubrir su cuerpo con trapos fríos y mojados para reducir su fiebre de 40 grados Celsius (104° Fahrenheit). Pero su familia llamó una ambulancia una vez que la temperatura le volvió a subir y tuvo problemas para respirar.

La ambulancia llegó tres horas después y lo trasladó en principio a una clínica que se negó a recibirlo debido a que no contaba con un oxímetro, que mide la saturación de oxígeno en la sangre. Fue llevado a otra clínica en donde tuvo que esperar dos horas más antes de que finalmente lo ingresaran.

Murió en el hospital una semana y media después.

“El doctor salió, me dijo que estaba delicado y falleció”, dijo Cristian Bolívar.