Guardia Costera de EEUU se apoya en celulares para rescates
BOSTON (AP) — La Guardia Costera de Estados Unidos está aprovechando los datos de ubicación de los teléfonos celulares para localizar rápidamente a navegantes en problemas.
El programa voluntario i911 le permite al servicio de guardacostas tener acceso a la ubicación del celular de los marineros para ayudar a las cuadrillas de rescate a encontrarlos con mayor facilidad. El software es un servicio gratuito para todo el personal de emergencias, incluyendo los guardacostas.
“Reduce enormemente el tiempo que pasamos buscando a alguien y permite que los equipos de rescate partan más rápido”, explicó el suboficial en jefe Andrew Case, del centro de la Guardia Costera en Woods Hole, Massachusetts.
El año pasado, ese centro en el noreste del país se convirtió en el primero en probar el sistema, el cual se expandió el 20 de marzo al resto del servicio.
El programa i911 requiere que alguien que necesite ayuda proporcione un número telefónico, dijo la suboficial Nicole Groll. Luego el navegante —ya sea de un kayak o un pescador comercial— recibe un mensaje de texto para que autorice compartir la información del GPS del celular con la Guardia Costera. Una vez que ese paso es completado, los guardacostas tienen acceso a información detallada para una búsqueda más precisa.
“Ahora sabemos dónde está usted y le podemos enviar nuestros servicios de rescate directamente”, afirmó Groll desde Boston.
El sistema no sustituye al radio VHF, que sigue siendo la mejor vía de comunicación en casos de emergencia, detallo la suboficial. El sistema sólo funciona si los marineros han activado los servicios de localización en sus celulares, subrayó la Guardia Costera.
Dependiendo del servicio de celulares, el programa i911 es capaz de determinar la ubicación de los navegantes en apuros hasta una distancia de 15 a 20 millas náuticas (28 a 37 kilómetros) de la costa.
Durante el periodo piloto, se analizaron más de 38.000 búsquedas y rescates en todos los estados contiguos de Estados Unidos, y el 89% ocurrieron dentro de 20 millas náuticas (37 kilómetros) de distancia.