Agreden a personal médico en hospital del centro de México
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — Un grupo de personas agredió a personal médico de un hospital de una zona conurbada de la capital mexicana alegando que no se les ofrece información sobre sus familiares enfermos con coronavirus, indicó el gobierno del Estado de México el sábado.
Los hechos ocurridos el viernes quedaron registrados en imágenes que circulan en las redes sociales y en las cuales se observa a los familiares en el interior del Hospital General de Ecatepec, municipio en el Estado de México. El grupo llega a una zona donde hay cadáveres en bolsas mortuorias —uno de ellos parcialmente descubierto_, y lanza reclamos al personal médico por la atención brindada.
De acuerdo con el gobierno de esa entidad, los familiares agredieron a un médico, a tres vigilantes y a una empleada administrativa.
El director del hospital, Josué López Vázquez, pidió ayuda a los cuerpos de seguridad y al lugar llegaron policías municipales y estatales. Posteriormente elementos de la Guardia Nacional para resguardar los accesos.
Por la noche, el el subsecretario de salud federal, Hugo López-Gatell, se refirió al incidente en el Hospital General durante su sesión informativa diaria sobre la pandemia.
“Lo que me parece dramático es que no hubiera llegado información a todas las personas y que haya quienes no identifican a COVID como una epidemia grave", sostuvo. "Espero que en ello no esté involucrado lo que ha ocurrido de desinformación, cuando hay personas o medios de información que propagan desinformación, pero es más triste en este momento”.
Las declaraciones de López-Gatell hacer referencia a lo ocurrido hace un par de semanas, cuando el conductor Javier Alatorre de la cadena TV Azteca —la segunda más grande del país— pidió al auditorio de su noticiario nocturno que no hiciera caso a las indicaciones del subsecretario de salud.
Apenas la semana pasada, la policía desmanteló cinco fiestas clandestinas en el municipio de Ecatepec, en una de las cuales se reportó que había más de 200 jóvenes.
El sábado, el gobierno del Estado de México informó que en el Hospital General de ese municipio fallecieron dos personas durante el turno vespertino y al informar sobre los decesos a los parientes, éstos ingresaron por la fuerza a las instalaciones.
“Mi hijo estaba bien, tengo fotos de que mi hijo estaba bien anoche todavía. Entré a las 12 del día buscarlo, yo entré a buscar a mi hijo donde hay más de 20 muertos con su bolsa con cierre. Yo destapé la bolsa de mi hijo, para corroborar si era mi hijo o no era mi hijo", declaró María Dolores Carrillo en entrevista con Grupo Imagen. “Lo único que exijo yo nada más que me entreguen completo el cuerpo de mi hijo. Yo no quiero que embolsado y que cenizas. Quiero a mi hijo completo”.
“Que nos entreguen nuestros cuerpos completos, porque sabemos que no existe el COVID. Aquí a mi hijo me lo inyectaron, yo creo que para matarlo”, agregó.
En un mensaje posterior, las autoridades del Estado de México señalaron que el manejo de los cadáveres se apega a los protocolos establecidos por las autoridades sanitarias a nivel federal.
En su conferencia de prensa, López-Gatell agregó que lo ocurrido en el hospital “me resulta dramático por muchas razones: por la pérdida de las vidas porque no queremos que pierda la vida nadie y le mando el pésame a la familia por la experiencia”.
El funcionario subrayó que “ella decía ‘yo lo entregué en buenas condiciones y aquí se murió’ y empezaba con una idea de una acción dirigida para que la persona perdiera la vida, eso me parece fuera de toda posibilidad, los hospitales son sitios de atención, no de daño”.
Hasta el sábado por la noche, México reportaba 22.088 personas contagiadas y 2.061 defunciones.
López-Gatell lamentó también que los familiares hayan manipulado las bolsas donde estaban los cadáveres, tal como se aprecia en los videos difundidos en las redes sociales.
“Estas bolsas no son cualquier cosa, son un equipo específico que se usa para aislar a los cuerpos y que no tengan un alto potencial para quienes los manejan”, dijo. “Son bolsas selladas con una solución desinfectante que se pone por encima y no conviene que se abran, porque una vez que ocurrió esto aumenta considerablemente el riesgo de contaminación”.
Familiares de otros enfermos de ese hospital se manifestaron en el exterior de la instalación la mañana del sábado hasta que les permitieron el acceso paulatino en grupos de 10 personas para realizar visitas.
No es la primera agresión al personal médico que se registra en el país, donde se han presentado casos en varios estados desde que las autoridades decretaron el estado de emergencia sanitaria por el coronavirus.
Las autoridades sanitarias mexicanas hacen llamados constantemente a la población para que no se agreda a los médicos.