Kim Jong Un aparece en público por primera vez en 20 días
SEÚL, Corea del Sur (AP) — El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, realizó su primera aparición pública en 20 días para celebrar la finalización de una fábrica de fertilizantes cerca de la capital, Pyongyang, informaron el sábado medios estatales, poniendo fin a una ausencia que había provocado conjeturas a nivel mundial sobre que podría estar gravemente enfermo.
Según la Agencia Noticiosa Central Coreana, Kim asistió a la ceremonia del viernes en la ciudad de Suncheon con otros altos funcionarios, incluyendo su hermana Kim Yo Jong, quien muchos analistas creen que se tomaría las riendas de la nación si su hermano se viera incapacitado para gobernar.
El diario oficial Rodong Sunmun publicó varias fotografías de Kim vestido de negro y sonriendo mientras visitaba la fábrica y cortaba un listón rojo, con su hermana mirando desde atrás.
En una de las imágenes, el Kim aparecía sonriendo y aplaudiendo junto a su hermana y otros altos cargos bajo un letrero con la frase “Fábrica de Fertilizantes Fostáticos de Sunchon: Ceremonia de finalización: 1 de mayo de 2020”. Los que parecían ser miles de trabajadores, muchos de ellos con mascarillas, estaban formados en filas en el enorme complejo, soltando globos al aire.
Las fotografías no mostraron indicios claros sobre si Kim sufría algún malestar. No fue visto caminando con un bastón, como el que utilizó en 2014 cuando se recuperaba de una supuesta cirugía en el tobillo. Sin embargo, en una de las imágenes en la fábrica aparecía un carro eléctrico verde, parecido al vehículo que usó en 2014.
Esta fue la primera aparición pública de Kim desde el 11 de abril, cuando presidió una reunión del Partido de los Trabajadores para discutir el coronavirus y designar nuevamente a su hermana como miembro suplente del poderoso Politburó del Comité Central del partido gobernante. Esto confirmó su importancia en el gobierno.
Las conjeturas sobre la salud de Kim se desataron tras el 15 de abril, cuando no acudió a la celebración del cumpleaños de su difunto abuelo y fundador de Corea del Norte, Kim Il Sung, que es el feriado más importante del país, por primera vez desde que asumió el poder en 2011.
La posibilidad de inestabilidad entre los altos niveles del gobierno plantearon dudas inquietantes sobre el futuro de la hermética nación con armamento nuclear, que ha construido un arsenal para amenazar al territorio continental estadounidense, mientras la diplomacia entre Kim y el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, lleva meses estancada.
Algunos expertos sostienen que Corea del Sur, así como sus vecinos en la región y su aliado Estados Unidos, deben empezar a prepararse para el posible caos que se desataría si Kim es apartado por problemas de salud o si fallece. Las hipótesis más pesimistas contemplan una oleada de refugiados norcoreanos a Corea del Sur o a China, o que militares conservadores suelten el control de las armas nucleares.
“El mundo no está preparado para la inestabilidad en Corea del Norte”, dijo Leif-Eric Easley, profesor en la Universidad Ewha en Seúl. “Washington, Seúl y Tokio necesitan una coordinación más estrecha en los planes de contingencia, mientras que las organizaciones internacionales necesitan más recursos y menos controversia sobre el papel de China”.
El Ministerio de Unificación de Corea del Sur, encargado de los asuntos intercoreanos, confirmó la visita de Kim a la fábrica de fertilizantes y dijo que formaba parte de sus esfuerzos para enfatizar el desarrollo económico del país. El ministerio pidió además discreción en la información relacionada con Corea del Norte, señalando que los rumores “infundados” de las últimas semanas han causado “una confusión y un costo innecesario” a la sociedad surcoreana y a sus mercados financieros.
El gobierno surcoreano, que tiene un historial mixto en lo relativo a rastrear a la élite gobernante en Pyongyang, había minimizado reiteradamente las conjeturas de que Kim, que se cree que tiene 36 años, padecería problemas de salud tras una operación.
La oficina del presidente surcoreano, Moon Jae-in, explicó que no había detectado indicios inusuales en Corea del Norte ni ninguna reacción de emergencia en el partido gobernante, en ejército ni en el gobierno. Seúl apuntó que creía que Kim seguía gestionando los asuntos de Estado, pero desde una ubicación no revelada fuera de Pyongyang.
Según la agencia noticiosa norcoreana, los trabajadores de la planta de fertilizantes dedicaron una “ovación atronadora” a Kim, quien dijo que está guiando a la nación en la lucha por armar una economía autosuficiente frente al “viento en contra” de las fuerzas hostiles.
El reporte no mencionó comentario alguno dirigido hacia Washington o Seúl.
Ante reporteros en la Casa Blanca, Trump rechazó comentar la reaparición de Kim, pero informó que tendría “algo que decir sobre eso en el momento adecuado”.
Cheong Seong-Chang, analista del Instituto Sejong de Corea del Sur, dijo que el video de Kim indica que se está recuperando de algún tipo de contratiempo médico que afectó su caminar, posiblemente relacionado con su tobillo.
En 2014, Kim desapareció del ojo público durante casi seis semanas antes de reaparecer con un bastón. La agencia de espionaje de Corea del Sur dijo en ese momento que le habían quitado un quiste del tobillo.
Los analistas dicen que la salud de Kim podría convertirse en un creciente factor de peso en los próximos años: tiene sobrepeso, fuma y bebe, y tiene antecedentes familiares de problemas cardíacos.
Si de repente no puede gobernar, algunos analistas han dicho que su hermana, que se cree que es cuatro años menor que él, se instalaría como líder para continuar la dinastía de herencia de Pyongyang que comenzó después de la Segunda Guerra Mundial.