Datos económicos elevan la presión para aliviar cuarentenas
Las consecuencias económicas de la pandemia en todo el mundo quedaron expuestas el jueves con la publicación de nuevos datos en Europa y Estados Unidos que mostraron el devastador impacto de las medidas diseñadas para frenar el coronavirus en el empleo y las empresas.
En Europa, donde más de 132.000 personas han muerto a causa del virus, el temor a un nuevo repunte en el número de infectados que pueda volver a desbordar los sistemas de salud templaba las esperanzas de que las economías, que ya atraviesan un momento delicado, recuperen el vigor a medida que los trabajadores vuelven a fábricas, tiendas y oficinas.
Los datos publicados el jueves mostraron que la economía francesa se contrajo un sorprendente 5,8% en el primer trimestre del año, su mayor descenso trimestral desde 1949, debido principalmente a las medidas de confinamiento en vigor desde el 17 de marzo.
España dijo que su economía perdió un 5,2% en ese mismo periodo por los efectos de la pandemia. La calificación de la deuda del gobierno italiano se redujo a poco más que bono basura, y la agencia de calificación Fitch espera que la economía italiana retroceda un 8% este año. Alemania, por su parte, prevé una contracción del 6,3% en su Producto Interno Bruto este año.
Y un nuevo reporte de la Agencia Internacional de la Energía, con sede en París, proyectó un descenso sin precedentes en la demanda global de energía para este año que sería el equivalente a perder toda la demanda energética de India, el tercer mayor consumidor del mundo.
Se espera que los datos de paro de la eurozona — que abarca a 19 naciones — que se presentarán más tarde el jueves muestren cómo los programas de protección laboral mantienen a millones de europeos en nómina, evitándoles la agonía del desempleo que ha sacudido a millones de estadounidenses.
A medida que las economías se reactivan, funcionarios gubernamentales y de salud vigilan muy de cerca las tasas de infección y el comportamiento de la población.
El gobernador de California tenía previsto cerrar todas las playas y parques estatales a partir del viernes luego de que la gente abarrotó la costa el pasado fin de semana ignorando las normas de distanciamiento social, según un documento enviado a jefes de policía de todo el estado. El de Nevada, por su parte, dijo que ampliará la orden de confinamiento hasta el 15 de mayo pero suavizará las restricciones para realizar algunas actividades al aire libre y para que algunos negocios vuelvan a funcionar a partir del viernes.
En Suecia, las autoridades esparcieron estiércoles maloliente de gallina sobre los terrenos de un parque urbano para evitar que la gente se acerque.
La promesa de un tratamiento efectivo contra el coronavirus — un fármaco experimental que podría acelerar la recuperación de los pacientes de COVID-19, la enfermedad causada por el virus — avivó el jueves la esperanza de un avance más rápido en la lucha contra la pandemia y en la recuperación de las economías y los modos de subsistencia.
El gobierno de Estados Unidos y otros dicen estar trabajando para hacer que el medicamento esté disponible para los pacientes lo más rápido posible. La noticia de los avances médicos impulsó a los mercados de todo el mundo, a pesar de los datos económicos que mostraron que la economía estadounidense se contrajo casi un 5% entre enero y marzo, su peor revés desde la Gran Recesión.
Aunque la vacuna contra el virus podría tardar un año o más, los expertos señalan que un tratamiento efectivo podría tener un profundo impacto en el brote. Las bolsas de todo el mundo subieron tras la noticia, con el Promedio Industrial Dow Jones ganando más de 530 puntos el miércoles, o más del 2%. Los mercados asiáticos disfrutaron de la misma oleada de optimismo el jueves.
El virus ha causado más de 225.000 decesos en todo el mundo, más de 60.000 de ellos en Estados Unidos, según un conteo de la Universidad Johns Hopkins. Las infecciones confirmadas superaron los 3,2 millones, incluyendo un millón en Estados Unidos, pero es probable que la cifra real sea mucho más alta por el acceso limitado a las pruebas, las diferencias a la hora de contabilizar a los fallecidos y la opacidad de algunos gobiernos.
La Organización Internacional del Trabajo, dependiente de Naciones Unidas, pronosticó que la pandemia ha dejado a 1.600 millones de personas que dependen de trabajos diarios o informales en un inminente riesgo de perder si medio de subsistencia. Esto es casi la mitad de la fuerza laboral mundial de 3.300 millones de dólares.
La OIT espera además la destrucción del equivalente a 305 millones de puestos de trabajo a tiempo completo entre abril y junio.
China y Corea del Sur, los primeros epicentros del brote, reportaron apenas cuatro nuevos contagios cada uno el jueves. La pequeña isla de Maldivas confirmó su primer deceso por el virus.
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Periodistas de The Associated Press en todo el mundo contribuyeron a este despacho.