HRW pide a Ecuador justicia por violencia durante protestas
BOGOTÁ (AP) — Human Rights Watch exhortó el lunes al gobierno de Ecuador a hacer rendir cuentas a los responsables de abusos violentos durante las protestas del año pasado para evitar infracciones futuras, sobre todo en un contexto en el que la pandemia de coronavirus genera descontento social.
Un reporte publicado por HRW señaló que los agentes de seguridad hicieron un uso excesivo de la fuerza contra los manifestantes durante las protestas de octubre de 2019, incluido disparar latas de gas lacrimógeno directamente a las personas desde una corta distancia.
Las protestas se desataron luego de que el presidente Lenín Moreno eliminó un subsidio a la gasolina. También hubo manifestaciones similares contra la desigualdad económica en países cercanos, como Chile y Colombia, en las semanas posteriores.
“Como muchos países, Ecuador podría enfrentar próximamente un escenario de crisis económica producto de la pandemia del coronavirus”, dijo José Miguel Vivanco, director para las Américas de HRW. “La lección que el gobierno debe sacar de lo ocurrido el año pasado es que, si las fuerzas policiales salen nuevamente a las calles, deben actuar dentro de la legalidad”.
Ecuador ha registrado 3.700 casos confirmados del nuevo coronavirus, con 191 muertes, lo que lo convierte en uno de los países más afectados de Sudamérica. En la ciudad costera de Guayaquil, donde se concentran gran parte de los casos, los hospitales están abrumados y algunos de los enfermos fallecen en casa sin poder recibir atención médica.
De acuerdo con HRW, por lo menos 1.500 personas resultaron heridas y 11 perdieron la vida durante las protestas de octubre, y al menos cuatro de esos decesos fueron aparentemente resultado de violencia excesiva por parte de las fuerzas de seguridad. Funcionarios ecuatorianos dijeron en ese entonces que la policía y el ejército actuaron en conformidad con la ley.
Conductores de autobuses, estudiantes universitarios e indígenas realizaron protestas durante 10 días que provocaron enfrentamientos callejeros y obligaron a muchos negocios a cerrar.
La organización revisó videos tomados de las protestas y habló con una decena de testigos que relataron cómo los periodistas y trabajadores humanitarios fueron golpeados por la policía. El grupo también habló con el ombudsman de la nación, quien dijo que 15 manifestantes perdieron al menos un ojo, aparentemente después de ser impactados en la cara con latas de gas lacrimógeno.
Eventualmente, el gobierno ecuatoriano rescindió las medidas de austeridad. Las autoridades están investigando nueve de las 11 muertes ocurridas durante las manifestaciones. El inspector general también investiga 24 casos de supuesta brutalidad a manos de la policía.
Human Rights Watch pidió a las autoridades realizar investigaciones imparciales sobre los casos de violencia por parte de la policía y manifestantes una vez que la nación acabe con su estado de emergencia a causa de la pandemia de coronavirus.
“Que todos los responsables por abusos cometidos en octubre de 2019 rindan cuentas ante la justicia es indispensable para disuadir tanto futuros abusos policiales como delitos por manifestantes”, señaló Vivanco.