A paso lento, México trata de blindarse contra coronavirus
CIUDAD DE MÉXICO (AP) — A paso lento, México sigue avanzando en el cese de actividades para tratar de frenar el alcance del coronavirus, cuyas cifras de contagios en el país también suben constantemente. Según el último informe oficial, hay 1.378 casos con 37 muertes.
Del total de casos, al menos 39 son de personal sanitario, 26 de ellos en la ciudad norteña Monclova, en el estado de Coahuila, donde el miércoles comenzó a desinfectarse un hospital público, indicó Manuel Cervantes, del Instituto Mexicano del Seguro Social. Además, llegaron equipos adicionales de protección personal para los profesionales de la salud.
En esas instalaciones se localizó un brote de coronavirus hace unos días, y un médico falleció por “exposición ocupacional”, es decir, por hacer su trabajo, confirmó Cervantes.
El Instituto Nacional Electoral informó el miércoles de la suspensión de las elecciones al Congreso en Coahuila y las municipales del estado de Hidalgo, en el centro del país, ambas previstas para junio.
En la capital, los centros comerciales suspendieron sus actividades, y la vida de la ciudad seguía ralentizándose en cumplimiento de la orden de suspensión de actividades no esenciales.
Este decreto incluyó que las compañías telefónicas “brindarán acceso a las antenas de los teléfonos celulares para que, a través de la Agencia Digital de Innovación Pública (ADIP), se mantenga un monitoreo del movimiento y contacto entre las personas en la Ciudad de México, con el objetivo de identificar si las personas cumplen con el aislamiento, y así reducir los contagios”, indicó el gobierno capitalino en un comunicado.
No obstante, se desconoce el alcance que pueda tener esta geolocalización de los ciudadanos, la cual ya se ha aplicado en otros países.
Vehículos de la policía hacían recorridos cerca de parques y lugares donde todavía se agrupaba gente para alertarlas a que se fueran a sus casas. En la periferia se mantenía la actividad, aunque no tan intensa como habitualmente.
El que mantuvo su agenda fue el presidente Andrés Manuel López Obrador, que inauguró un hospital en el sureño estado de Oaxaca en un acto sin público, aunque mantuvo su costumbre de viajar en un vuelo comercial, donde le fue tomada la temperatura al igual que al resto de pasajeros, sin que presentara fiebre.
En el sureste de México, en el estado de Tabasco, las autoridades permitieron a 49 ciudadanos británicos desembarcar de un crucero anclado frente a su costa caribeña para que regresaran en avión a su país. La operadora del barco, a cambio, pagó el vuelo de 141 mexicanos que quedaron varados en Gran Bretaña debido a las restricciones de viaje por el coronavirus.
La Marina se llevó el martes a un pasajero que necesitaba hospitalización. El gobierno no informó si en el barco había casos de COVID-19.
Por otra parte, y mientras continúan los preparativos sanitarios en las ciudades más pobladas, llegaron al país procedentes de China 100.000 mascarillas, 50.000 kits de prueba para detectar el coronavirus y cinco respiradores artificiales donados por la Fundación Jack Ma y la Fundación Alibaba, según indicó el centro cultural chino en México.
Poco antes, El Salvador confirmó a su segundo fallecido por el coronavirus.
Fue un hombre de 89 años que sufrió un paro respiratorio y que había dado negativo en una primera prueba, pero en la segunda se confirmó la enfermedad, informó el ministro de Salud, Francisco Alabí.
Desde Panamá, se reportó que el país registra 1.276 contagiados, 32 fallecimientos y nueve recuperados.
“Jamás los panameños hemos estado frente a una amenaza colectiva tan grande como esta”, dijo el director de la Caja de Seguro Social, Enrique Lao, en rueda de prensa.
Se informó también que las 45 camas de cuidado intensivo del principal hospital de seguridad social en la capital ya están ocupadas. Las autoridades panameñas de Salud han aplicado más de siete mil pruebas para detectar el coronavirus.
En Bolivia, el ministro de Salud, Aníbal Cruz, reportó que en el país se registran 123 casos confirmados y 8 fallecidos.
En cuanto a Colombia, el gobernador del departamento de Nariño manifestó su preocupación por el ingreso ilegal de unos 3.000 venezolanos y ecuatorianos desde Ecuador pese a que desde hace tres semanas está cerrada la frontera con ese país debido a la pandemia.
Por su parte, el general Jorge Hoyos, comandante del ejército en la zona, señaló que debido a ese flujo migratorio registrado en la última semana hubo que reforzar la vigilancia con 500 hombres y sobrevuelos de la Fuerza Aérea.
Según las autoridades sanitarias en el país hay 1.065 contagiados y 17 fallecidos.
Por otro lado, Perú sumó 47 muertos y 1.323 infectados, mientras que en los hogares en cuarentena hubo 43 violaciones sexuales, entre ellas 27 niñas, así como 538 mujeres golpeadas, informaron las autoridades.
Desde el 16 de marzo, los 32 millones de peruanos tienen prohibido salir entre las 6 de la tarde y las 5 de la mañana. En cinco regiones donde un gran número de personas no respetó las medidas tienen prohibido salir desde las 4 de la tarde.
En Guatemala, el gobierno anunció que por segundo día se han suspendido los vuelos que a diario retornan a migrantes deportados desde Estados Unidos. La suspensión ocurrió luego de que la semana pasada un migrante dio positivo al coronavirus tras haber retornado al país desde Brownsville, Texas.
Según cifras del Instituto Guatemalteco de Migración, de febrero a marzo el número de deportados bajó casi a la mitad.
Posteriormente, el presidente Alejandro Giammattei anunció que hay 45 contagios y un muerto.
Por la noche, la cancillería informó que un guatemalteco de 45 años bajo custodia del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas estadounidense ha dado positivo de coronavirus y fue hospitalizado.
En Chile se reportaron 3.031 casos y 16 fallecidos, cuatro más que la víspera.
Las autoridades han comenzado a preocuparse por la falta de ventiladores mecánicos. Algunas universidades del país ya trabajan en sus propios prototipos de respiradores básicos.
En Santiago, donde siete barrios y más de 1,3 millón de personas están en cuarentena total, se registraban largas filas _que no respetaban la distancia aconsejada de un metro_ para cobrar los seguros de cesantía y las indemnizaciones de los que han sido despedidos.
La policía capturó a una mujer con coronavirus después de que se fugó del hospital de Talcahuano, en la región de Bio Bío.
Por la tarde la cancillería confirmó en Twitter la muerte de Fernando Labra, cónsul de Chile en Rosario, Argentina. El canciller Teodoro Ribera había informado el lunes que el diplomático estaba hospitalizado por coronavirus.
Desde Ecuador, el viceministro de Salud, Ernesto Carrasco, dijo que en el país hay 2.748 contagiados, 93 fallecidos y 3.200 casos sospechosos. La provincia de Guayas sigue siendo el epicentro con 1.937 casos.
En toda Latinoamérica hay más de 19.500 infectados y más de 400 fallecidos por el coronavirus.
La pandemia ha infectado a más de 932.000 personas y causado la muerte a más de 46.000 en todo el mundo, según el Centro de Ciencias e Ingeniería de Sistemas de la Universidad Johns Hopkins, que basa sus datos en los informes de los gobiernos y las autoridades de salud de cada país.
En la mayoría de la gente el nuevo coronavirus provoca síntomas leves o moderados que desaparecen en dos a tres semanas. Pero en algunas personas, sobre todo los adultos mayores y quienes padecen trastornos de salud subyacentes, puede causar enfermedades más graves e incluso la muerte.