Feligreses de Luisiana desacatan prohibición de reuniones
CENTRAL, Luisiana, EE.UU. (AP) — Cientos de feligreses acudieron el domingo a los servicios religiosos en una iglesia en Luisiana, desacatando una prohibición a las reuniones numerosas por el coronavirus, lo cual hizo enojar a los vecinos.
Por su parte, el gobernador John Del Edwards reiteró la advertencia de que pronto los hospitales podrían verse sobrepasados con nuevos casos de la enfermedad COVID-19.
Unas 500 personas de todas las edades se reunieron en la iglesia Life Tabernacle en Central, una ciudad de cerca de 29.000 habitantes a las afueras de Baton Rouge.
Ministros adjuntos y feligreses les pidieron a los reporteros que se alejaran e indicaron que no permitirían cámaras en la propiedad. Señalaron que les habían pedido que no hablaran con la prensa.
Al otro lado de la calle, Paul Quinn y otros vecinos hacían lo posible por mantenerse a unos dos metros (6 pies) de distancia unos de otros y expresaban su oposición a la realización de las ceremonias religiosas.
“Otras congregaciones están utilizando el internet, Skype y otras formas de reunirse. ¿Por qué ellos no pueden hacerlo? ¿Qué los hace tan especiales?”, preguntó Quinn. “Desearía que la policía estatal interviniera... Si salen de la iglesia y acuden a la tienda de comestibles, es un riesgo grave para la salud. No saben a cuántas personas están afectando y al parecer no les importa. Eso es un problema”.
En un breve comentario en el estacionamiento de la iglesia, Timothy Spell, padre del pastor Tony Spell, dijo que la congregación tenía derecho a reunirse y que no forzaron a nadie a acudir. Indicó que no estaban violando ninguna ley y que seguirán con las ceremonias.
Más de 3.500 personas han sido diagnosticadas con el COVID-19 en Luisiana y más de 150 de ellas han muerto, de acuerdo con las cifras dadas a conocer por el gobierno del estado el domingo.
El virus ha cobrado la vida de siete personas y más de 160 han sido diagnosticadas con el coronavirus en el municipio de East Baton Rouge, en el que se encuentra la iglesia, de acuerdo con datos del estado.
La gente que viola la prohibición está siendo egoísta y “extremadamente irresponsable”, dijo el gobernador John Del Edwards el domingo en Nueva Orleans. Ellos “toman el tiempo y la atención de los socorristas y provocan que el virus continúe expandiéndose”.
La policía de Nueva Orleans indicó en un comunicado que dispersó un velorio de cerca de 100 personas el domingo, emitiéndole un citatorio judicial a una persona de 28 años que se rehusó a detener el evento.