Contagios y muertes por COVID-19 al alza en América Latina
LA HABANA (AP) — El nuevo coronavirus mantiene los números activos y al alza en cuestión de horas.
Cuba y Costa Rica reportaron sus primeros fallecidos, Nicaragua y El Salvador su primer infectado. Ecuador, Panamá y Perú fueron tres de los países que registraron más casos a lo largo del miércoles. Chile decretó “catástrofe nacional”. Sólo México se ha mostrado cauto para reaccionar ante la pandemia y el gobierno insiste en que “todo a su tiempo”.
Por la mañana, el Ministerio de Salud de Cuba reportó la primera muerte en la isla por el COVID-19: un italiano de 61 años cuyo caso había sido confirmado tras su ingreso al país a comienzos de mes. Hay 11 contagiados en territorio cubano.
Poco después, Ecuador suspendió los viajes interprovinciales por aire y tierra, mientras policías y militares verifican en las calles que los ciudadanos se desplacen sólo por situaciones de emergencia, compra de comida y medicinas o para ayudar a enfermos o ancianos. Quienes infrinjan la cuarentena podrán ser multados con sumas de entre 200 y 6.000 dólares y penas de prisión de uno a tres años.
Hasta ahora hay 168 contagios. La secretaria de Gestión de Riesgos, Alexandra Ocles, informó que tan sólo el miércoles durante el día se registraron 13 más que en la mañana. Agregó que el número de personas en cerco epidemiológico subió a 575 y que el número de fallecidos ascendió a tres.
Entrada la tarde, Costa Rica confirmó su primer muerto. En un tuit, el presidente Carlos Alvarado dijo que se trataba de un adulto mayor.
Panamá difundió información sobre el virus poco después y _con 109 infectados y un fallecido_ decretó toque de queda entre las 9 pm y las 5 am. Los encargados de la seguridad en las calles, así como los servicios de salud y los bomberos, están exentos.
Por la noche, Nicaragua reportó su primer caso confirmado de coronavirus, un nicaragüense de 40 años que llegó al país procedente de Panamá, informó la vicepresidenta Rosario Murillo.
En declaraciones al canal 4 de televisión, la también primera dama dijo que el paciente está “estable” y con atención médica.
El gobierno de Daniel Ortega anunció hace días que no decretaría “ningún tipo de cuarentena” ni restringirá la entrada de extranjeros procedentes de países afectados por la pandemia.
Sectores de la oposición, médicos y empresarios han criticado al gobierno por haber convocado a marchas y carnavales de simpatizantes sandinistas en distintas zonas del país.
Más temprano, Murillo había informado sobre la llegada de una brigada médica cubana integrada por “virólogos, epidemiólogos y médicos clínicos intensivistas” que trabajarán en Managua “en relación a los 22 medicamentos que han aplicado en distintos países con éxito, y fundamentalmente en China” para tratar el COVID-19.
Más temprano, el presidente chileno Sebastián Piñera declaró el estado de catástrofe nacional, que regirá desde la medianoche del jueves y durará 90 días. La medida permite restringir el derecho a la locomoción y reunión en lugares públicos, y ordenar el acopio de alimentos y otros artículos.
En Chile el avance del coronavirus ha sido uno de los más rápidos de la región, aunque de los 238 contagiados sólo ocho están hospitalizados y nadie ha muerto.
Por otro lado, Perú endureció su cuarentena y prohibió salir de las casas durante la noche luego de que los infectados subieran a 145, con 28 nuevos casos en 24 horas.
En conferencia de prensa, el presidente Martín Vizcarra también prohibió desde el jueves la circulación de cualquier automóvil particular. Se anunció que Perú empleará la villa deportiva de los Juegos Panamericanos de 2019 para que la utilicen los infectados que no estén graves pero que requieran cuidados.
El gobierno ordenó no cortar el servicio de agua potable a los deudores y anunció el reparto de agua gratuita en cisternas a 400.000 personas pobres que carecen del servicio mientras dure la cuarentena.
En Argentina, donde hay 77 infectados y hubo dos fallecidos, la Administración Nacional de Aviación Civil habilitó a otras compañías aéreas a repatriar a miles que se encuentran varados en el exterior, lo que sólo hacía Aerolíneas Argentinas.
En tanto, la alcaldía de Buenos Aires anunció que los bares y restaurantes podrán estar abiertos y el número máximo de comensales serán los que puedan sentarse en las mesas. Los grandes comercios podrán abrir mientras puedan garantizar que no haya más de una persona por cada 16 metros cuadrados, pero los cines serán clausurados y los patios de comidas sólo venderán alimentos para llevar.
En los próximos días las autoridades evaluarán el funcionamiento de la red del metro para lograr que viajen únicamente pasajeros sentados.
Por otro lado, en Colombia el Ministerio de Salud reportó por la noche otros nueve casos, con lo cual ya suman 102 en el país, de los cuales 45 están en Bogotá.
En Bolivia, la presidenta interina Jeanine Áñez lanzó un bono equivalente a 72 dólares para cada niño que esté en una escuela pública, el cual será entregado en abril dado que los colegiales no tendrán el desayuno escolar por unos 15 días debido a la cuarentena.
Las familias y empresas pequeñas estarán exentas de pagar dos meses del capital de su deuda y se prohibió que se les corten los servicios básicos.
En el centro de La Paz, un grupo de médicos exigió condiciones para atender la enfermedad en los centros de salud.
Bolivia reportó 12 casos, la mayoría por contagios internos.
A su vez, el presidente guatemalteco Alejandro Giammattei anunció un nuevo contagio, lo que llevó la cifra a siete infectados y un fallecido. El mandatario pidió al Congreso una ampliación presupuestaria de unos 1.000 millones de dólares para reactivar la economía por la crisis.
México planea adelantar los pagos de las pensiones debido a la pandemia de coronavirus, que se ha demostrado que es más peligrosa para las personas mayores y quienes tienen problemas de salud preexistentes.
El presidente Andrés Manuel López Obrador dijo el miércoles que su gobierno comenzará a emitir el equivalente a dos pagos bimestrales _de unos 112 dólares_ a partir de esta semana, pero pidió a los beneficiarios considerar que no se trata de un pago doble, sino uno que incluye dos bimestres, y por ello se espera responsabilidad en el manejo de los recursos.
Por su parte, el presidente salvadoreño Nayib Bukele reportó por la noche el primer contagio en el país, de un hombre que viajó a Italia.
“Presumimos que debió entrar por un punto ciego, tenemos su salida a Italia, pero no tiene ingreso a El Salvador y aquí está físicamente”, dijo el mandatario en cadena nacional de radio y televisión.
Bukele dijo que se ordenó un cordón sanitario en el municipio de Metapán, al occidente del país, para identificar a las personas que tuvieron contacto con el paciente que dio positivo.
“Tenemos un paciente con COVID-19 pero el país está listo para atender a 1.300 casos: el 80% en habitaciones que se han obtenido por medio de convenios con hoteles y otro 20% en camas hospitalarias ambulatorias”, agregó.
Horas antes, el Gabinete Especial de Crisis Económica anunció una medida para enfrentar la situación: las personas naturales o jurídicas que se vean afectadas directamente por la pandemia no pagarán energía eléctrica, agua, telefonía, internet, televisión por cable, créditos hipotecarios, personales, tarjetas de crédito y deudas con casas comerciales por un periodo de tres meses.
Los pagos serán distribuidos en un periodo de dos años, no serán sujetos de mora o intereses financieros ni afectarán su calificación crediticia.
Poco después, el gobierno anunció la suspensión de las deportaciones de salvadoreños desde Estados Unidos y México hasta nuevo aviso.
El nuevo coronavirus no deja de preocupar a diversos organismos internacionales. La directora de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), Carissa F. Etienne, exhortó a todos los países de la región a que adopten medidas de inmediato para reorganizar sus servicios sanitarios y proteger a los profesionales de la salud al enfrentar al COVID-19.
“El mensaje es claro: este es el momento de que los países aumenten su capacidad para detectar casos y atender a los pacientes; y se aseguren de que los hospitales tengan el espacio, los suministros y el personal para brindar la atención necesaria”, dijo en un comunicado.
“Si todos colaboran, todavía no es demasiado tarde para contener la situación, aplanar la curva de la epidemia y así evitar sobrecargar a los servicios de salud para que puedan dar los cuidados a todos los que los requieran”, agregó.
En América Latina se habían registrado hasta el martes al menos 1.300 casos de COVID-19 y 15 fallecidos.
En todo el mundo, 185.000 personas se han infectado y más de 7.300 han fallecido, pero la mitad de los que alguna vez tuvieron el virus se han recuperado. La mayoría de los enfermos presenta síntomas leves como fiebre o tos, pero para las personas mayores o que tienen otros problemas de salud pueden ser peores, incluso neumonía.