Reporte apunta a fallas en caída de avión Ethiopian Airlines
El software diseñado para evitar la pérdida de altura se activó cuatro veces cuando los pilotos del avión de Ethiopian Airlines trataban arduamente de controlar su Boeing 737 Max 8 antes de estrellarse el 10 de marzo del 2019.
Esa fue una de varias conclusiones incluidas en un reporte sobre el suceso, difundido el lunes por la Oficina de Investigaciones de Aviación de Etiopía. El reporte surge un día antes del primer aniversario del acontecimiento, en que murieron las 157 personas que estaban a bordo de la aeronave.
El documento además ofrece recomendaciones para mejorar la seguridad y asoma hipótesis sobre la causa del desastre, pero el análisis no estará concluido hasta que se difunde un reporte final, probablemente a fines de año.
El software, llamado MCAS, permite que el avión no pierda su sustentación aerodinámica, es decir, que no se vea forzado a bajar la trompa. Ello fue lo que provocó los esfuerzos desesperados de los pilotos por recuperar el control de la nave.
El reporte menciona también un sensor defectuoso que desató una cadena de fallas, que a su vez provocaron la caída del avión. Dice que los pilotos debían haber recibido entrenamiento adecuado, con simuladores de vuelo, sobre qué hacer si ese sistema fallaba.
Uno de los puntos de venta más usados por Boeing para promocionar el Max es que era esencialmente igual a los más antiguos 737 y por lo tanto no había que ofrecer entrenamiento adicional.