Incluso sin mayoría, premier israelí dijo que “no se irá”
JERUSALÉN (AP) — El primer ministro israelí dijo el sábado en actitud desafiante que “no iría a ningún lado” incluso cuando otra vez se quedó corto de la mayoría parlamentaria con sus aliados intransigentes en la tercera elección en su país en menos de un año.
En lo que llamó una “conferencia de emergencia”, Benjamin Netanyahu acusó a sus opositores de intentar “robar las elecciones” al aliarse con partidos dirigidos por árabes que dijo que eran hostiles al estado.
Los resultados de las elecciones parecían extender el punto muerto político que ya lleva un año del país y debilitar al longevo gobernante mientras se prepara para ir a juicio por cargos de corrupción a mediados de mes.
El asediado Netanyahu intentó lograr una victoria decisiva en la votación del lunes y las primeras encuestas de salida indicaron que su partido Likud y aliados religiosos y nacionalistas más pequeños obtuvieron 60 escaños, sólo uno menos de la mayoría requerida para formar un nuevo gobierno. Netanyahu triunfantemente declaró una “enorme victoria”.
Pero el conteo final anunciado por la comisión electoral determinó que el júbilo de Netanyahu fue prematuro. Likud surgió como el partido individual más fuerte, con 36 escaños, al frente de los 33 del rival Partido Azul y Blanco. Pero con sus pequeños aliados, el bloque derechista de Netanyahu capturó sólo 58 escaños.
Está programado que Netanyahu vaya a juicio el 17 de marzo por cargos de fraude, abuso de confianza y aceptar sobornos. Está acusado de aceptar obsequios de amigos acaudalados y ofrecer favores a poderosos magnates mediáticos a cambio de una cobertura positiva en la prensa. Netanyahu afirma su inocencia y acusó a la prensa, policía y fiscales de conspirar para derrocarlo.