Túnez nombra un nuevo gobierno tras meses de bloqueo
TÚNEZ (AP) — Túnez tenía gobierno por fin, tras cuatro meses de disputas entre partidos rivales en la joven democracia norteafricana.
Tras un debate de 15 horas, el parlamento tunecino aprobó el jueves por la mañana por 129 votos a favor, 77 en contra y una abstención el gobierno formado por Elyes Fakhfakh. Un intento anterior de formar gobierno con otro primer ministro fracasó el mes pasado.
El partido islamista Ennahdha obtuvo seis ministerios, más que cualquier otro partido, tras ser el más votado en las elecciones parlamentarias en octubre. Sin embargo, la formación no consiguió una mayoría parlamentaria y ha tenido problemas para alcanzar acuerdos con otros partidos sobre quién debería dirigir el gobierno.
El presidente, Kais Saied, amenazó con disolver el Parlamento y convocar nuevas elecciones si la cámara no llegaba a un acuerdo. Sindicatos y líderes empresariales intervinieron, organizando semanas de diplomacia indirecta para intentar que los partidos rivales alcanzaran una solución de compromiso.
Seis de los nuevos 30 ministros son mujeres, y por primera vez una de ellas, la ministra de Justicia Thouraya Jeribi, ocupará uno de los cargos más importantes.
El gobierno se centrará en impulsar la economía digital y combatir el desempleo y el extremismo violento, indicó el primer ministro. Fakhfakh dijo que quería luchar contra el desencanto generalizado en el país, nueve años después de que manifestantes tunecinos derrocaran al líder autocrático del país, construyeran una nueva democracia y desencadenaran alzamientos en toda la región en lo que se conoció como la Primavera Árabe.
“Aunque hemos hecho progresos significativos en la senda a la democratización, aún estamos muy lejos de la transición social y económica”, dijo a los parlamentarios durante el debate.
El primer ministro designado señaló que casi un millón de jóvenes, incluidos más de 200.000 con títulos universitarios, están en paro, lo que hace que muchos abandonen el país y emigren, de forma legal o no, para buscar una vida mejor en otros lugares.
“Los 11 millones de tunecinos deben ponerse a trabajar y esforzarse para construir el país”, señaló.