Planes de salud demócratas dividen a los sindicatos
LAS VEGAS (AP) — Las propuestas de los candidatos demócratas a la presidencia de un seguro médico único están generando fisuras en el movimiento laboral, enemistando a sindicatos y dividiendo un sector poderoso en momentos en que las primarias entran en calor.
El movimiento en general está a favor de un seguro universal, pero algunos sindicatos, sobre todo los que se pasaron años negociando beneficios buenos, tienden a apoyar mejoras escalonadas en lugar de un cambio abrupto y la instauración de un seguro médico gubernamental que eliminaría los planes de los sindicatos.
Este tema ha creado fuertes roces entre Bernie Sanders, el principal impulsor del Medicare para Todos, y algunos sindicatos. Medicare es un seguro médico que actualmente cubre a las personas mayores de 65 años o con incapacidades, y los demócratas proponen convertirlo en un seguro para todos. Las diferencias entre las propuestas salieron a la luz esta semana cuando Sanders hizo campaña en Nevada, el primer estado de las primarias en el que los sindicatos son muy fuertes, y es previsible que el tema siga provocando tensiones en California y Michigan.
“Queremos conservar el seguro del sindicato”, expresaron Gary Morris y su esposa Mamie casi al unísono mientras hacían cola para votar por adelantado esta semana. Morris, un portero de un casino de Las Vegas de 61 años, mostraba un papel en el que analizaba las propuestas de cada uno y expresaba su preferencia por algunos rivales de Sanders. “Esto es algo importante”, afirmó.
El sindicato más fuerte de Nevada, la Unión de Trabajadores Culinarios, que tiene 60.000 afiliados y beneficios médicos excelentes, no apoyó a candidato alguno de cara a los caucuses del sábado. Pero en el pasado ha expresado su oposición al plan de salud de Sanders.
“Luchamos mucho, nadie nos regaló nada aquí en Las Vegas”, afirmó Geoconda Argüello-Kline, dirigente del sindicato, mientras señalaba fotos de décadas de huelgas al finalizar una actividad con empleadas de limpieza. “No fue fácil. Hicimos actos, actividades de desobediencia civil. Muchos fueron golpeados en los piquetes”.
El sindicato distribuyó la semana pasada un folleto con las posturas de cada candidato en torno a varios temas, incluido el seguro médico. Decía que el plan de Sanders “acaba con el seguro de los culinarios”, mientras que los de todos los demás “protegen el seguro de los culinarios”.
El folleto generó una furibunda reacción de los partidarios de Sanders. Agüero-Kline dijo que la bombardearon con amenazas de muerte y publicaron la dirección de su casa en la internet. Argüello-Kline, quien es una inmigrante nicaragüense, dijo que por primera vez en su carrera como militante sindical, sus hijos temieron por su seguridad.
Sanders fue el único aspirante a la nominación presidencial demócrata que no se presentó el miércoles a un piquete de los culinarios frente a un casino.
Horas después, defendió su plan en el debate demócrata.
“Jamás firmaré una ley que reduzca los beneficios que tienen”, aseguró. “Solo expandiremos su plan, para todos los sindicatos del país”.
La pelea de Sanders con los culinarios es un ejemplo de la disyuntiva que enfrenta el sindicalismo acerca de si se debe pelear por intereses específicos o por el bien de todos los trabajadores.
Los sindicalistas que apoyan Medicare Para Todos dicen que todos los trabajadores, incluidos los que tienen buenos planes médicos, deberían estar a favor de ampliar el acceso a una cobertura médica.
“Ya no hay debate. Todo el mundo reconoce que la única solución es el Medicare Para Todos”, expresó Marc Dudzik, coordinador nacional de una campaña a favor de un seguro médico único que dice representar a 15 sindicatos nacionales.
Otros sindicatos no opinan lo mismo, incluido uno de la construcción (North America's Building Trades Unions), que tiene un plan médico manejado por ellos mismos, no por aseguradoras privadas.
“Es una cooperativa manejada por los afiliados. Cuando alguien dice que nos van a sacar nuestro seguro, eso es un problema”, expresó el presidente del sindicato Sean McGarvey.
Shaun Richman, director del programa Escuela de Estudios Laborales de la Universidad Estatal de Nueva York-Empire State, dijo que la mayoría de los sindicatos sacrificaron aumentos salariales para conservar una buena cobertura médica y que generalmente los planes médicos ofrecidos por las empresas son un obstáculo en las negociaciones de los convenios colectivos.
“La mayoría de los sindicatos no quieren que los patrones ofrezcan seguros médicos, pero hay algunos que dicen que el sistema funciona y creen que pueden salir perdiendo” con un seguro universal, manifestó Richman.
Las fricciones de Sanders con el Sindicato Culinario son explotadas por sus rivales. Pete Buttigieg prometió preservar el seguro médico de ese sector. Dijo que su plan “Medicare Para Todo El Que Lo Quiere protege sus seguros y la libertad de los afiliados al sindicato de elegir qué tipo de cobertura les sienta mejor”.
La presidenta de la Asociación de Asistentes de Vuelo Sara Nelson respondió diciendo en un tuit: “Dejen de perpetuar este mito repugnante. No todos los afiliados a sindicatos tienen planes médicos del sindicato que proteger”.
Para completarla, otro sindicado, la Unión Internacional de Empleados de Servicios, emitió un comunicado apoyando Medicare para Todos.
La propuesta de Sanders tiene bastante apoyo en el mismo sindicato de culinarios. José Álvarez, que trabaja en el servicio a las habitaciones de un casino, dijo que 36 barmans fueron despedidos hace poco porque sus trabajos fueron automatizados.
“¿Qué pasa si te quedas sin trabajo? ¿O si te despiden? Hay que tomar esas cosas en cuenta”, dijo Álvarez. “Todo el mundo debería tener cobertura médica”.