Restaurarán línea directa para ayudar a migrantes detenidos
LOS ÁNGELES (AP) — Un juez federal ordenó al gobierno del presidente Donald Trump que restablezca un teléfono directo gratuito que permitía a los migrantes detenidos informar sus preocupaciones sobre las condiciones de su custodia. El gobierno suspendió el servicio poco después de que apareciera en el programa de televisión "Orange Is the New Black".
El juez federal de distrito André Birotte Jr. emitió el martes una orden judicial preliminar que ordena a las autoridades que restablezcan la línea directa que era manejada desde 2013 por la organización sin fines de lucro Freedom for Immigrants.
Freedom for Immigrants alegó que el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas de Estados Unidos (ICE por sus siglas en inglés) retiró el teléfono gratuito en agosto, después de que apareció en el programa de Netflix, llamando la atención sobre las críticas del grupo a las condiciones de detención de los migrantes.
El juez Birotte falló que las expresiones de la organización sin fines de lucro "fueron un factor sustancial y motivador" detrás del cierre, y que la medida obligó a los inmigrantes a pagar un dólar por minuto para llamar al grupo en una línea que ahora es monitoreada por el gobierno.
"Este caso debería recordarnos a todos que el gobierno de Trump no es una ley en sí misma, sino que más bien debe rendir cuentas ante el pueblo y nuestra Constitución", dijo en un comunicado Christina Fialho, cofundadora y directora ejecutiva de la organización sin fines de lucro.
No quedó claro de momento cuándo se restablecería la línea. Nadie respondió un mensaje enviado al ICE en busca de comentarios.
El ICE dijo anteriormente que la Freedom for Immigrants había hecho mal uso de la línea directa mediante llamadas tripartitas para permitir que los detenidos de inmigración hablaran con sus familias. La línea no era monitoreada ni grabada, dijo la agencia, por lo que los migrantes podían buscar abogados y hablar sobre sus casos.
La organización sin fines de lucro también dirige programas de visitas a centros de detención de migrantes en todo Estados Unidos.
La línea directa recibió entre 600 y 14.500 llamadas por mes, según la demanda.