El Senado absuelve a Trump de todos los cargos
WASHINGTON (AP) — El presidente Donald Trump fue absuelto el miércoles en el Senado de los dos cargos de juicio político: abuso de autoridad y obstrucción al Congreso, dando fin a apenas el tercer proceso de este tipo en la historia de Estados Unidos, el cual dividió al país, puso a prueba las normas cívicas y alimentó la tumultuosa contienda de 2020 rumbo a la Casa Blanca.
Con el magistrado presidente John Roberts al frente del juicio, los senadores que juraron hacer “justicia imparcial” se pusieron de pie junto a sus escritorios y uno a uno votaron “culpable” o “inocente” en un conteo expedito y prácticamente de acuerdo a los lineamientos de su partido. Los visitantes, incluyendo a algunos aliados del presidente, observaron el proceso desde la galería. Roberts leyó su declaración de que Trump, “queda, en virtud de este acto, absuelto de los cargos”.
El resultado pone fin a meses de notables procedimientos de juicio político iniciados por la presidenta de la Cámara de Representantes Nancy Pelosi, y culminados en el Senado, que preside el republicano Mitch McConnell, reflejando la profunda división partidista en el país en el tercer año del gobierno de Trump.
Lo que inició como una solicitud de Trump a Ucrania de “hacernos un favor” se convirtió en un extenso reporte de 28.000 páginas recabado por investigadores de la Cámara de Representantes, en el que se acusa a un presidente estadounidense de involucrarse en una diplomacia cuestionable que ponía en riesgo las relaciones exteriores de Estados Unidos para beneficio personal y político, al presionar a un aliado para investigar a su rival demócrata Joe Biden en anticipación a los próximos comicios.
Ningún presidente ha sido destituido por el Senado en la historia del país.
Un Trump fortalecido políticamente había pronosticado su exoneración, y ha usado el veredicto como un himno político en su campaña de reelección. El presidente asegura que no hizo nada malo, y ha tachado la investigación como una “cacería de brujas” y una “farsa”. También ha dicho que se trata de una extensión de la pesquisa del fiscal especial Robert Mueller sobre la interferencia rusa en la campaña de 2016 por parte de sus opositores desde el comienzo de su mandato.
La campaña política de Trump tuiteó videos, declaración y una danza de dibujos animados para celebrar que fue “reivindicado”. El mismo Trump publicó en Twitter que daría un comunicado el jueves desde la Casa Blanca sobre el “triunfo de nuestro país en la farsa del juicio político”.
El líder demócrata en el Senado, Chuck Schumer, dijo que siempre habrá un “asterisco gigante junto a la exoneración del presidente” debido al juicio expedito en el Senado y al rechazo de los republicanos a la presencia de testigos.
La mayoría de los senadores expresaron sentirse incómodos con la campaña de presión de Trump a Ucrania que resultó en los dos cargos de juicio político. Pero se necesitaba que dos terceras partes de ellos votaran “culpable” para alcanzar el criterio constitucional de delitos y faltas graves que permitiría declarar culpable y destituir al mandatario. Los conteos finales ni siquiera estuvieron cerca.
En el primer cargo de juicio político, abuso de autoridad, la votación fue de 52-48 en favor de la absolución. En el segundo, obstrucción del Congreso, fue absuelto por un total de 53-47.
Sólo un republicano, Mitt Romney por Utah, el candidato derrotado del partido en los comicios de 2012, rompió filas con su partido.
Romney estuvo a punto de romper en llanto al decir que, basándose en su fe y su “juramento ante Dios”, votaría culpable en el primer cargo, abuso de autoridad. Dijo que votaría a favor del mandatario en el segundo cargo.
Tanto Bill Clinton en 1999 como Andrew Johnson en 1868 tuvieron apoyo bipartidista cuando mantuvieron el cargo después de enfrentar un juicio político. El presidente Richard Nixon presentó su renuncia en lugar de enfrentar una insurrección en su propio partido.
Previo a las votaciones, algunos de los senadores más observados subieron al pleno del Senado para informarles a sus electores, y al país, cuál sería su voto. El capellán de la cámara alta inició el juicio con la oración diaria para los senadores, incluyendo una en favor de la “integridad”.