Chile: denuncian ineficacia para juzgar abusos a los DDHH
SANTIAGO DE CHILE (AP) — La Comisión Chilena de Derechos Humanos denunció el miércoles que la justicia ha sido poco eficaz a la hora de juzgar los cientos de abusos cometidos por las fuerzas de seguridad en la represión de las protestas que comenzaron en octubre y que de las 4.300 denuncias que recibió la fiscalía nacional sólo en 30 causas hay personas formalizadas.
“Nosotros no hemos visto de parte de los tribunales superiores de justicia un compromiso genuino con las causas de derechos humanos” tras el estallido social, dijo en una conferencia de prensa el presidente de la Comisión, Carlos Magnotta, quien comparó la inacción de la justicia con la impunidad durante la dictadura militar de Augusto Pinochet (1973-1990).
“El fenómeno de la impunidad que regía hasta el día previo al 18 de octubre respecto de los crímenes cometidos durante la dictadura cívico militar... se ha mantenido y se ha prolongado", afirmó Magnotta.
Una misión de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) se encuentra en el país hasta el viernes para verificar la situación de vulneración de los derechos humanos y los avances realizados en las últimas semanas en esta área. La CIDH ya había visitado el país en noviembre.
En tanto, Marta Valdés, la portavoz de la Coordinadora Nacional de Victimas Oculares -que se han convertido en el emblema de la represión policial- reclamó que “no queremos más compañeros muertos, no queremos más matanza de nuestro pueblo, no queremos más traumas oculares, no queremos más ciegos”.
Las declaraciones se produjeron tras conocerse que la noche del martes un carro de los Carabineros (policía) atropelló a una persona a la salida de un estadio de fútbol mientras otro vehículo lanzaba agua contra un grupo de jóvenes que acudieron a socorrer a la víctima. El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) anunció una querella contra el gobierno. La fiscalía informó que el conductor del vehículo será formalizado mientras el gobierno solicitó a la policía una investigación sobre el caso.
Valdés denunció que el gobierno no los ha contactado y que el programa sanitario para atender a las víctimas de daños oculares sufridos durante la represión de las protestas funciona con serias deficiencias.
“Nosotros no hemos recibido ninguna comunicación del gobierno, del Estado; parece que no existieran los traumas oculares, como no existen las violaciones a los derechos humanos”, afirmó Valdés.
En total la Coordinadora ha interpuesto 17 denuncias individuales y colectivas por traumas oculares y violaciones de los derechos humanos, 12 de ellas contra el presidente Sebastián Piñera, el anterior ministro del Interior Andrés Chadwick y su reemplazante Gonzalo Blumel y el director de Carabineros, Mario Rozas.
A pesar de la prohibición impuesta por la policía a sus oficiales de utilizar armas con perdigones, la semana pasada se registraron cuatro nuevas víctimas oculares, denunció la Coordinadora.
The Associated Press contactó a los Ministerios de Gobierno, del Interior y de Salud para obtener comentarios sobre las denuncias, pero no obtuvo respuesta.
La revuelta social que comenzó el 18 de octubre se desató por un alza en las tarifas del metro que se tradujo en la destrucción de la mayor parte de las estaciones de ese transporte; incendios y saqueos a centenares de grandes supermercados y decenas de farmacias, quemas de pequeños y medianos comercios y oleadas de destrucción que afectaron a la capital chilena y varias ciudades del interior del país.
Miles de comercios permanecieron cerrados por semanas y el temor a la violencia y la fuerte disminución del transporte público se tradujeron en que decenas de miles de trabajadores no pudieran movilizarse hasta sus lugares de trabajo y a que las jornadas laborales se acortaran.
Las demandas de los chilenos incluyen mejores pensiones, salarios, salud, educación y medicamentos más baratos, entre otras.